Un colectivo animalista alertó ayer de la presencia de veneno en las zonas destinadas a perros dl parque de El Lauredal. Los portavoces de esta asociación se hicieron eco de la denuncia de varios ciudadanos, que utilizaron las redes sociales para pedir a los propietarios de mascotas que extremen las precauciones. Al parecer la presencia de veneno en la zona ya se ha cobrado la primera víctima con el fallecimiento de un perro de tres años que había ingerido un alimento emponzoñado.

No es la primera vez que ocurre un suceso de estas características en Gijón. Los dueños de perros aseguran que ya se ha denunciado la presencia de carne con alfileres o veneno en otros parques públicos. La Policía logró dar en una ocasión con un hombre al que se acusaba de uno de estos envenenamientos en El Llano. El hombre quedó absuelto tras el proceso judicial al que fue sometido.