Durante seis semanas el taiwanés Chi Po Hao atrapó las luces y los sonidos de las calles de Gijón, y con ese material inauguró ayer, en Laboral Centro de Arte y Creación Industrial, la instalación "Lightscape", que estará abierta al público hasta el próximo día 11 de diciembre. Hoy y mañana la entrada es gratis, al aplicarse puertas abiertas en el centro.

"Lightscape" tiene ya antecedentes en las ciudades de Taipei (la capital de facto de la República de China) y Nueva York, en las que, como en Gijón, Chi Po Hao tiene como objetivo captar y transformar las luces artificiales de las ciudadades durante la noche y la madrugada, identificando los cambios de luces y sombras que dan lugar a unas imágenes concretas y sonidos diferentes.

El proyecto, que ayer fue presentado por el artista, se enmarca en el acuerdo que, por tercer año consecutivo, desarrollan Laboral Centro de Arte y Creación Industrial y la National Taiwan Museum of Fine Arts. La instalación que el público puede visitar se compone de una pieza sonora generada a partir de las grabaciones en vídeo de 360 grados que el artista taiwanés captó en las calles de Gijón, desde Laboral hasta el centro de la villa, pasando por La Guía, el barrio de La Arena y la playa de San Lorenzo, atendiendo a las luces del alumbrado urbano, de los escaparates de las tiendas y hasta los semáforos y también, en la parte sonora, el ruido de los vehículos en circulación. Así, explicó el artista, "la luz se convierte en una partitura musical" por medio de ocho canales de audio.

En cuanto a la relación con Taipei y Nueva York, Chi Po Hao constató que "existe algo común en la memoria colectiva", aunque las luces de Gijón son menos desordenadas, subrayó.

La instalación también se compone de ocho paraguas que actúan como pantalla de un micro-proyector fabricado por el propio artista durante su estancia en Gijón.