Como una gran familia de amigos a orillas del Mar Cantábrico. Así celebraron los 140 integrantes del grupo "La Gaita de Gijón-Amigos de Llanes" su reunión anual el pasado sábado en el hotel Kaype de la localidad llanisca de Barro. Allí se encontraron unos cien gijoneses y alrededor de cuarenta vecinos de Bimenes, aunque también había amigos de otros concejos como el colungués.

La frase "Los amigos son la familia que se escoge" encabezó la carta de platos que degustaron durante la cena y da buen ejemplo de lo que han hecho durante los últimos catorce años: juntarse y festejar su amistad al son de la música. Los comensales disfrutaron de una sopa de pescados y mariscos, lomos de merluza del pinchu a la sidra con verduritas, tacos de ternera envueltos en jamón ibérico al queso de Los Beyos y de postre charlota de turrón y chocolate, todo regado con vino, café y cava.

Nada mejor para digerir la cena que un poco de música, que en el encuentro del grupo "La Gaita de Gijón-Amigos de Llanes" sonó por partida doble. De un lado "La Orquestina de Tere Rojo", de Gijón, que ya amenizó la entrada de los invitados al salón donde se celebró la cena y la fiesta. Por otra parte el grupo contó por tercera vez con la actuación de la cantante de tonada Alicia Villanueva, de Bimenes, que con tan sólo quince años dejó una vez más asombrados a los comensales. Acudió con su madre, Liliana Mejido Peón, quien además de la actuación de la reconocida cantante celebraba su cumpleaños. El que está próximo a acabar es el año de Alicia Villanueva, que ha ganado en su categoría los certámenes de canción asturiana de Gijón, Oviedo, la cuenca del Caudal, San Martín del Rey Aurelio y Les Mines de la Nueva.

Ha cantado para el grupo "La Gaita de Gijón-Amigos de Llanes" en dos ocasiones más y el sábado los deleitó con temas como "Cuatro coses tien Asturies" y "La Zagalina". La joven de Bimenes canta desde que tenía ocho años, una disciplina que aprendió con Anabel Santiago, que además de su maestra y amiga es, sencillamente, "la mejor", resumió Villanueva. La fiesta, que volverá a Barro por San Valentín, se prolongó el sábado hasta la madrugada.