La Federación de Asociaciones de Vecinos de Gijón anuncia "una escalada de movilizaciones" durante el primer trimestre del año en protesta contra la contaminación en la zona oeste de Gijón, tras nuevos episodios como los registrados el pasado fin de semana, cuando vehículos aparcados en distintas calles de los barrios de Jove y El Lauredal aparecieron con una denso capa de polvo negro.

Los vecinos, indignados por la aparición de una gran cantidad de polvo negro "con una procedencia por ahora desconocida" recuerdan que "es sólo la punta del iceberg de todas las partículas contaminantes que los vecinos de la zona sufren a diario". "Ante la gravedad de los datos de contaminación que semana tras semana se conocen y la deficiente respuesta de la Administración regional", el movimiento vecinal ha mostrado su convencimiento de que es el momento de proponer "una serie de acciones que conlleven un cambio de actitud por parte de las personas e instituciones que tienen en sus manos solucionar este grave problema medioambiental".

Para ello, la FAV trasladará a la Plataforma y a distintos colectivos de Gijón una propuesta de calendario de acciones entre las que se encuentran una ronda de contactos con los grupos parlamentarios, una campaña de denuncia a nivel estatal y una escalada de movilizaciones durante el primer trimestre del año.

Adrián Arias, presidente de la FAV, entiende que "sin presión social y movilización de los vecinos de la zona el Principado va a seguir mirando para otro sitio". "Estamos ante una situación gravísima y los vecinos están siendo ninguneados por las administraciones", denuncia, en medio de una "espiral de declaraciones cruzadas que no están llevando a la Consejería encabezada por Belén Fernández a tomar medidas efectivas ni a poner en valor el progresivo deterioro de la salud de muchas personas que sufren enfermedades de carácter respiratorio". "La gente está sufriendo y merece una respuesta. Y las respuestas si no se dan, debemos exigirlas", recalca Arias.

La consejería de Medio Ambiente ha abierto una investigación para determinar el origen de esa reciente nube de polvo negro. Técnicos de la administración regional recogieron muestras días atrás en la zona afectada con el apoyo de guardas del Servicio de Control Ambiental, con el objeto, según señalaron fuentes del citado departamento, de "poder delimitar con claridad el área que resultó afectada".