La concejala de Hacienda, Ana Braña, estaba llamada a ser la protagonista ayer de la última jornada plenaria ordinaria del año, al tener que comparecer a petición del PSOE por los problemas que está teniendo la contratación pública municipal. Sin embargo, parte de ese protagonismo se lo robó la cada vez más evidente ruptura entre el PSOE y Xixón Sí Puede, así como las insinuaciones tanto desde el PSOE como desde el PP de un respaldo de la marca local de Podemos al gobierno local de Foro, que se han intensificado con la posibilidad cada vez más cercana de que XSP e IU faciliten la aprobación de los presupuestos municipales.

"Éste no es el gobierno de Xixón Sí Puede y sí es el de Foro, aunque a algunos les sienta mal que tengamos posibilidades de negociación y no hagamos el no por el no permanentemente. Nuestra opción es buscar la mejor vía para lograr las mejores opciones para la ciudadanía. No vinimos a hacer juego de tronos", se defendió ayer Nuria Rodríguez, concejala de XSP. Previamente, la bancada podemista tuvo que escuchar las irónicas afirmaciones de Pablo González, edil del PP. "Uno no sabe bien a quién preguntar las cosas ante la dificultad de ver quién decide las cosas en este ayuntamiento", señaló González antes de aclarar que Xixón Sí Puede "está en el gobierno de facto", mientras que Foro está "de iure", es decir, como gobierno legítimamente acordado pero no "de hecho".

José María Pérez, portavoz del PSOE, acusó, por su parte, a la marca local de Podemos de "gobernar aquí en coalición vergonzante con la derecha socia del gobierno de Rajoy", en referencia a que Foro y PP concurrieron juntos a las elecciones generales. Nuria Rodríguez, sin embargo, recordó la anterior negociación presupuestaria para defender la postura de Xixón Sí Puede y criticó a los socialistas por ir en contra de las cuentas foristas para 2016 pese a que admitieron casi todas sus alegaciones. "El PSOE presentó entonces 21 enmiendas y les aceptaron 20. Y aún así votaron en contra. Nuestro grupo presentó ocho y no se aceptó ninguna. A partir de ahí, podemos hacer cábalas en otro sentido al que ellos aluden", argumentó Rodríguez.

Esta escenificación del panorama de reproche casi continuo entre los grupos de la oposición que se vive en el Ayuntamiento se produjo en el debate por la comparecencia de Ana Braña, a la que le tocó defenderse de las críticas por la gestión de los procesos de contratación y las adjudicaciones a las ofertas más baratas, que han traído problemas en ejecución de obras y para trabajadores de firmas adjudicatarias. Braña enumeró las medidas que están tomando para mejorar la contratación y aseguró que "desde 2014, de todos los contratos firmados sólo se presentaron once recursos y sólo se estimaron dos, uno de ellos en su totalidad".

El PSOE se mostró especialmente duro con su gestión. "La apuesta por las bajas temerarias es un seña de identidad de la política de este gobierno", criticó José María Pérez, que puso cifras sobre la mesa: un 58% de contratos menores adjudicados únicamente por el criterio del precio más barato o el servicio del programa 11x12 en los colegios, licitado recientemente con una baja del 68,37%. Braña se justificó, por su parte, asegurando que ocurre lo mismo en otras administraciones. "Usted es experta en no responder a los problemas repartiendo basura entre los demás", le respondió Pérez.