La Policía Local participó entre los días 12 y 18 de este mes en una campaña especial de control a conductores impulsada a nivel nacional por la Dirección General de Tráfico. En total los agentes de la Jefatura de la calle San José realizaron 1.601 pruebas de alcoholemia a otros tantos ciudadanos. Once de los examinados arrojaron un resultado positivo en los test. Además, los agentes multaron a otros tres conductores que se habían puesto al volante después de haber consumido algún tipo de estupefaciente como cocaína, anfetamina y cannabis.

La mayor parte de los positivos -cuatro de once-, se produjeron el día 13, el segundo que se realizaban estas pruebas. En total ese día fueron examinados 313 ciudadanos. Esta campaña especial de la Policía Local y la Dirección General de Tráfico ha servido para confirmar el aumento de la concienciación entre los conductores gijoneses. Y es que tras la realización de 1.601 pruebas sólo el 0,68 por ciento de los conductores arrojó en los test un resultado superior al permitido (0,25 miligramos de alcohol por litro de aire espirado). Un porcentaje muy similar al que reflejaba la estadística de los agentes a principios de este año. Y es que durante 2015 sólo uno de cada cien conductores dio positivo en este tipo de pruebas.

La Policía Local de Gijón aumentó la vigilancia en las calles del concejo en el verano de 2014. Fue entonces, hace más de dos años, cuando los agentes comenzaron a realizar, además de los test de alcoholemia, pruebas para la detección de drogas en el organismo de los conductores. En esta última campaña impulsada por la DGT fueron sancionados tres ciudadanos: uno de ellos había consumido cocaína antes de ponerse al volante, otro anfetamina y un tercero había combinado cocaína y cannabis. Todos ellos tendrán que comparecer ahora ante el juez de guardia.