Las conversaciones, sobre el pacto de los presupuestos, entre el PSOE e IU, habían durado días. Ahora se firmaba el pacto, nos dice LA NUEVA ESPAÑA, "al aceptar el PSOE todas las condiciones de IU, fue in extremis unos minutos antes del pleno". El presupuesto llegaba a los 19.000 millones de pesetas y, con las peticiones de IU, se aprobaba crear un defensor del ciudadano, eliminar el "silencio administrativo", un salario social y una partida para solidaridad internacional.