El médico Luis Olay acaba de recoger en Luarca la distinción "Amigos de la Biblioteca" 2016, un galardón del Ayuntamiento de Valdés que pretende dar publicidad al trabajo de las bibliotecas públicas y fomentar la lectura. El jefe del servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Universitario de Asturias (HUCA) es un ávido lector que cree que la literatura permite llegar a lugares y tiempos que no pisaremos nunca. Tal vez por eso lee cada noche junto a sus hijos. En esta entrevista habla de literatura, pero también de sanidad. Es partidario de proponer a los profesionales mejores o distintas ofertas para que se interesen por las plazas que quedan sin cubrir, reiteradamente, en los hospitales y centros de la zona rural.

-Acaba de recoger una distinción en una biblioteca pública, ¿cree que estos espacios deben potenciarse?

-Por supuesto. Creo que las bibliotecas deberían ser, junto con otros espacios públicos, uno de los pilares educativos de nuestra sociedad. La biblioteca es un espacio vivo, mágico e interactivo. Debemos mentalizar a nuestros jóvenes de la importancia de la lectura y, a la vez, de lo interesante que puede resultar compartir esa lectura con otros. A esos lugares es adonde nos llevan las bibliotecas.

-¿Qué radiografía hace de la sanidad asturiana?

-En nuestra comunidad autónoma la sanidad ha estado siempre muy bien valorada por los usuarios. La inversión en sanidad es alta, aunque pienso que aún no lo suficiente. Asturias es una de las comunidades con la población más envejecida. Y el gasto medio por habitante es alto en estas circunstancias.

-¿Se necesitan más médicos y recursos?

-Habría que hacer un análisis detallado de la situación. En servicios hospitalarios punteros, la dotación, tanto de personal como tecnológica, es adecuada. Sin embargo, hay espacios rurales con una necesidad mayor de personal. Creo que debe escucharse al colectivo médico en general, sentarse a hablar y adecuar los presupuestos a las necesidades reales.

-¿Es partidario de destinar más partidas presupuestarias a la sanidad? ¿Por qué?

-Creo que la inversión en sanidad en Asturias está por encima de la de otras regiones españolas, aunque creo también que podrían mejorarse puntualmente algunos aspectos, como la inversión en investigación. Invertir en sanidad es invertir también en prevención y divulgación. Y ese dinero repercute positivamente en todos los demás estamentos sociales.

-¿Nota los siempre polémicos recortes?

-Se notaron más de lo que se notan. En los peores momentos de la crisis, cuando se bajaron los sueldos a los funcionarios, cuando faltaba inversión en los hospitales, sí se pudieron notar los recortes. Todo el mundo los padeció en mayor o menor medida. Quiero ser optimista y pensar que la situación está cambiando. Parece que la crisis no aprieta tanto ahora.

-Los hospitales de las alas de Asturias tienen más problemas para cubrir las plazas. El PP plantea una discriminación positiva para paliar la falta de personal. ¿Qué opina?

-La situación en los hospitales rurales, por lo que nos trasladan los compañeros que allí trabajan, es muy distinta de la de los hospitales de la zona central. Los grandes hospitales responden en forma y tiempo a las necesidades de un profesional, por ejemplo, en una situación extrema en una guardia. La discriminación positiva es una idea a tener en cuenta. Se podrían alcanzar acuerdos muy interesantes si se escuchara a los profesionales.

-¿Por qué es tan difícil cubrir las plazas de los hospitales rurales?

-En las alas, las cosas son más complicadas, los recursos más limitados, y a esto se añade la distancia a los núcleos de población, los gastos añadidos en alojamiento, etcétera.

-Las investigaciones avanzan y cada día se cuestionan más los tratamientos de la medicina tradicional. Ocurre con el uso y abuso de antibióticos. ¿Existen argumentos sólidos para dudar de la medicina que conocemos?

-Cada día asistimos a noticias de ese tipo, en las que se cuestionan aspectos de salud que parecían irrefutables. Yo siempre recomiendo fijarse muy bien en la fuente de la noticia, porque existe demasiada información, y no toda es fiable. Es cierto que el abuso de antibióticos puede llevar a crear resistencias a los mismos. Esto es algo que se sabe desde hace decenas de años, aunque ahora se habla más de ello, quizá porque existe un abuso real de los antibióticos. Antes de dudar de los pilares básicos que sostienen nuestra salud, debemos comprobar siempre que las afirmaciones que leemos o escuchamos se basan en sólidos fundamentos científicos.

-¿Cómo poner coto al cáncer?

-La prevención del cáncer es posible y absolutamente necesaria. La prevención primaria, la más eficaz, incluye el abandono de hábitos como el tabaco y el alcohol, la dieta sana y equilibrada y el ejercicio físico moderado. La prevención secundaria incluye las campañas de detección precoz, como la del cáncer de mama, de colon, de cérvix o de próstata. La prevención mejora los resultados de incidencia, prevalencia y supervivencia del cáncer. Es la medicina del futuro.

-¿La sociedad asturiana es y está sana?

-La sociedad asturiana está aprendiendo a ser sana. Los hábitos alimenticios están cambiando ya desde la infancia y los resultados los veremos dentro de unos años. Aún es alto el índice de obesidad infantil. Pero estamos asistiendo a cambios importantes. La población acude a los programas de detección precoz, y aumenta el número de deportistas de todas las edades. Debe ser una sociedad sana, y depende del esfuerzo de todos nosotros, desde los profesionales sanitarios, pasando por los medios informativos, divulgadores de salud, y, por supuesto, de la concienciación de los ciudadanos.

-Usted tiene sus orígenes en Luarca. ¿Qué opina de la evolución del occidente asturiano? ¿Necesita más apoyo institucional para crecer como siempre se ha reclamado en la población?

-El occidente asturiano estuvo aislado durante muchos años debido a las vías de comunicación. Hoy, la Autovía del Cantábrico coloca a Luarca a 40 o 45 minutos de Oviedo o Gijón, y parece que en este tiempo las cosas van cambiando a mejor. El apoyo institucional es más necesario ahora que nunca, porque el occidente de Asturias, que ahora está más cerca gracias a la autovía, necesita ser mostrado en toda su belleza.