Cuatro minutos. Ése es el tiempo que el Ayuntamiento pide a cada gijonés que dedique a reflexionar sobre los futuros usos de Tabacalera. Son los cuatro minutos que se necesitan para contestar a una encuesta ciudadana que se conforma como uno de los tres elementos que configuran el proceso de participación abierto sobre Tabacalera. A la encuesta recién abierta en la web participatabacalera.gijon.es se suman las mesas sectoriales que se vienen celebrando con la participación de profesionales de distintos ámbitos y un taller vecinal pensado específicamente para los residentes de Cimadevilla. La suma de los resultados de todas estas acciones generará la base para definir la propuesta final de usos de Tabacalera.

Antes de entrar en materia la consulta plantea dos interrogantes para concretar si el encuestado sabe donde está Tabacalera y si es un habitual del barrio de Cimadevilla. Luego llega el momento de hablar de los usos. Sobre la mesa hay cuatro propuestas: el Museo de Gijón para aprovechar el valor histórico del edificio y explicar el proceso de transformación de la ciudad, un espacio de exposiciones dentro del impulso de Gijón como destino de turismo cultural, un espacio para creadores con infraestructuras donde poder desarrollar sus proyectos y un centro de innovación social donde "los ciudadanos encontrarán información, herramientas y asesoramiento para participar en los proceso de transformación de la ciudad y colaborar en la toma de decisiones".

En los cuatro apartados se pide al encuestado que valore del cero al diez hasta qué punto está de acuerdo con dedicar una parte del edificio a esa opción. Una valoración que se completa con preguntas más concretas sobre los contenidos que deberían encontrarse en el futuro Museo de Gijón o la necesidad de más salas de exposiciones en la ciudad. Esa parte de la consulta se remata con una opción abierta para que el participante pueda plantear otro uso y función en espacios del inmueble.

La consulta, que es anónima, se completa con una serie de preguntas generales para definir la residencia, edad, sexo y nivel de estudios de los participantes. La encuesta está a disposición de los ciudadanos en la web participatabacalera.gijon.es pero también en los centros municipales integrados. Allí habrá personal y ordenadores a disposición de quienes quieran hacer oír su voz en el diseño del futuro de una de las piezas más singulares de la ciudad. El edificio que se construyera como convento para las Agustinas Recoletas se reconvirtió en su día como espacio industrial ocupado por las cigarreras y se reivindica ahora como motor para un nuevo Gijón.