El fuerte temporal de viento que a lo largo de las últimas horas ha azotado Asturias empieza a notarse en Gijón. Los agentes de la Policía Local han precintado el parque Isabel la Católica para evitar que las fuertes rachas de viento provoquen desprendimientos en los árboles y estos generen daños personales a los deportistas o viandantes que cada mañana frecuentan esta zona verde.

Según la estación metorológica local el temporal se dejó notar en Gijón sobre todo de madrugada. A eso de las seis y media de la mañana se registraron rachas de hasta 65 kilómetros por hora. La situación gijonesa no es la peor. La Agencia Estatal de Meteorología prevé que a lo largo de todo el día el viento alcance velocidades de hasta 120 kilómetros por hora por lo que se recomienda tener especial precaución.

En la zona rural de Gijón la caída de varios árboles en el camino del Tragamón ha afectado al tendido eléctrico de la zona. Algo similar sucedió de madrugada en el camino de Cefontes, que tuvo que cortarse por la caída de árboles que en este caso también afectó al tendido eléctrico.

En la costa el oleaje no ha llegado a ser tan fuerte como se preveía aunque se espera que la situación empeore en las próximas horas. A pesar de todo al o largo de la mañana los habituales del paseo del Muro de San Lorenzo tuvieron que tener cuidado para no darse un chapuzón con las olas que en algunos momentos invadían la acera.