Sólo un par de sesiones de trabajo sobre el diseño de la renta social han bastado para que la "entente cordiale" entre el gobierno forista y Xixón Sí Puede entre en ebullición. "No han entendido nada de lo que XSP planteó desde el minuto uno sobre la renta social. O hay modificaciones en estas bases o, lógicamente, nosotros nos desmarcaremos", sentenciaba ayer la edil Estefanía Puente tras salir de la reunión donde los representantes de Foro presentaron a los grupos municipales de la oposición las bases de la convocatoria de esas ayudas sociales: unas organizadas como pago mensual y otras como ayudas finalistas para comprar productos concretos. La puesta en marcha de esta renta social fue el argumento de Xixón Sí Puede e IU para facilitar a Foro los presupuestos de 2017 con su voto de abstención en el Pleno.

Puente dejó claro ayer que la propuesta que les presenta Foro desde la Fundación Municipal de Servicios Sociales no cumple con ninguno de los dos objetivos que Xixón Sí Puede considera irrenunciables en ese plan de emergencia social: que en Gijón no haya ninguna persona o familia sin ingresos o con ingresos insuficientes. Esos ingresos mínimos vienen fijados por el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM) y son de 532 euros por persona, con incrementos según el número de miembros de la unidad económica de convivencia independiente (el concepto que ahora se fija en las bases) hasta llegar a los 1.065 euros para unidades de cuatro miembros o más. La edil de XSP entiende que con las actuales bases "difícilmente" se cumplen esos objetivos ya que hay requisitos excluyentes.

Xixón Sí Puede ya había mostrado tras la primera sesión de trabajo que estaba en contra de establecer un tope de 250 euros al mes y de que a la hora de determinar los ingresos de la familia se sumaran las ayudas que el Ayuntamiento da para alquiler, becas comedor o gastos energéticos. A esas críticas sumaba ayer otras, al analizar al detalle la propuesta forista. Puente exige que se baje de un año a seis meses el requisito de tiempo que el beneficiario esté empadronado en Gijón, que se amplíe la ayuda a colectivos que ahora quedan fuera como jóvenes extutelados, que se de apoyo también a los refugiados y que se reordenen los requisitos que se exigen a los más jóvenes.

"El argumento que nos da el equipo de gobierno es que siguen la línea del salario social del Principado y precisamente eso es lo que nosotros criticábamos porque el salario social deja gente fuera. No es de recibo que se siga por esa línea", sentenció la concejala. Xixón Sí Puede adelantó que presentará propuestas para modificar el proyecto forista.

"¿Qué negociaron?"

Precisamente el desencuentro entre Foro y Xixón Sí Puede evidenciado en la comisión extraordinaria sobre la renta social fue motivo de reflexión para César González. El edil del Grupo Municipal mostró "la sorpresa" de esta disparidad de visiones sobre una iniciativa que lleva sobre la mesa desde finales del año pasado como base del acuerdo presupuestario. "Si se facilita un acuerdo es porque hay una base sólida, que no hay diferencias en lo fundamental. ¿Qué negociaron entonces? Porque no estamos hablando de diferencias de matiz", indicaba el edil.

En cuanto al análisis concreto de las bases, González mostró sus dudas sobre el sistema de identificación de los beneficiarios de ayudas cuando vayan a los comercios a comprar los productos subvencionados."Esperemos que ese código del que nos hablan no sea un código para pobres. Hay que ser prudentes con esa identificación para que no genera una estigmatización", concretó el socialista.

El PP también anunciaba ayer que presentará su propia contrapropuesta a "esta renta social que ha quedado en lo que nos temíamos, en un bluff. No solventa los problemas de casi nadie y menos de los colectivos más necesitados", explicó Pablo González. El edil popular criticó que el formato del pago directo de ayudas obvia a colectivos tan necesitados como los pensionistas con pensiones bajas y, sin embargo, se abre a personas de cualquier edad en mejores condiciones. "Al final se queda en un sistema para gestionar el pago de facturas y no en una alternativa real para las personas que más lo necesitan", indicó. Y otra critica del PP: "Con este borrador de bases hemos perdido la oportunidad de aglutinar ayudas que están desperdigadas".

Aunque menos contundentes que Xixón Sí Puede, a la espera de analizar la documentación, desde IU también hay serias dudas sobre la idoneidad del planteamiento que se hace de la renta municipal. Ana Castaño ve unas bases "confusas" en cuya aplicación podría darse la paradoja de dejar atrás a algunas familias en situación de mayor necesidad. Tanto IU como XSP defienden que el diseño final de la renta cuente con la colaboración de las entidades sociales de la ciudad.

En cuanto a Ciudadanos, su único edil reivindica un informe de la Consejería de Servicios Sociales que asegure la compatibilidad con la percepción del salario social; incorporar programas personalizados de inserción social y homogeneizar los criterios para el acceso.