La estación de medición de la contaminación atmosférica ubicada en el barrio de Santa Bárbara registró en la tarde de ayer un incremento de la contaminación por partículas del 2.100%, según ha denunciado la Coordinadora Ecologista de Asturias.

Las mediciones, que se hacen públicas en la web del Principado, recogen sendos picos de contaminación en las partículas inferiores a 10 micras (PM 10) y en las inferiores a 2,5 micras (PM 2,5), a las ocho de la tarde de ayer.

A esa hora, se pasó de la medición anterior de 29 microgramos de PM 10 a 263 microgramos por metro cúbico. En cuando a las PM 2,5, se pasó de una medición anterior de 10 microgramos a 221 microgramos por metro cúbico a esa hora.

"Hemos pedido información al Ayuntamiento de Gijón y a la Consejeria de Medio Ambiente del Principado para que nos detallen que paso ayer por la tarde para que se disparase la contaminación de partículas a las 20 horas con un incremento del 2.100% en Gijón", señala Fructuoso Pontigo, portavoz de la Coordinadora Ecologista de Asturias.

La Coordinadora Ecologista resalta que hoy por hoy los picos de contaminación de partículas inferiores a 2,5 micras no están regulados "a pesar de los anuncios del Principado de su regulación".

El grupo ecologista recuerda que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó en el año 2005 unos valores límite anual para partículas PM 2,5 en 10 microgramos por metro cúbico y un límite de 25 microgramos por metro cúbico para las 24 horas, mientras que "la tolerante normativa española marca un límite anual de 25 microgramos por metro cúbico de alerta para las PM2,5".

Pontigo recalca que los picos de contaminación atmosférica "disparan los ingresos hospitalarios en Asturias por enfermedades respiratorias de acuerdo a un estudio epidemiológico realizado por la consejería de Sanidad del Principado de Asturias".

El portavoz de la Coordinadora agrega que la evidencia científica no sugiere ningún umbral por debajo del cual no se prevean efectos adversos en salud tras la exposición a las partículas, a lo que añade que "aún por debajo de los niveles de calidad de aire considerados como seguros por la legislación ambiental, las partículas se asocian con efectos nocivos sobre la salud, por lo que la Organización Mundial de la Salud recomienda lograr las concentraciones de partículas más bajas posibles". Recomendación que a su juicio el Gobierno del Principado incumple "de forma significativa".