La terminal de graneles de El Musel, Ebhisa, se encamina hacia su segunda huelga en este mes, después de que las reuniones que empresa y trabajadores mantuvieran ayer en la empresa y en el Servicio Asturiano de Solución Extrajudicial de Conflictos (Sasec) concluyeran sin acuerdos. La asamblea de trabajadores tendrá hoy la última palabra para decidir si sigue adelante con la convocatoria de ocho días de huelga, a partir de las seis de la madrugada de este domingo, o si la desconvoca aceptando las propuestas de la empresa.

Ebhisa es la terminal por la que se aprovisionan de materias primas los hornos altos de Arcelor Mittal en Gijón, la térmica de EdP en Aboño y otras centrales térmicas de Asturias, el norte de León y Palencia. La terminal ya estuvo siete días de huelga a principios de mes. Los sindicatos reclaman un aumento de plantilla para evitar sobrecarga de trabajo y problemas de seguridad y también reclaman la negociación de horarios de parte de la plantilla a la que la empresa modificó la jornada. El Puerto sostiene que el motivo real de la huelga es la obligación, por sentencia firme, de que cada trabajador devuelva 3.904 euros al haberse anulado un plus pactado en el convenio colectivo de 2013.

Los efectos de los siete días de huelga de principios de mes aún se siguen notando. A primera hora de la mañana de hoy está previsto el atraque en Ebhisa del "Cape Claudine" para descargar 77.000 toneladas de mineral de hierro, tras una semana de espera a pocas millas de la costa gijonesa. El pasado miércoles entró en la terminal el "Mineral Ningbo", con 150.000 toneladas de mineral, tras 10 días de espera para atracar.