La compañía Deloitte, una de las más importantes y prestigiosas firmas privadas de servicios profesionales a nivel internacional, basa su estrategia de competitividad en el mundo en la robotización de muchos de sus servicios. Así lo explicaron ayer algunos de sus responsables en la sede de la auditora en Bilbao que ayer impartieron en la Escuela Politécnica de Ingeniería el taller "Deloitte Works IT" con el objetivo de acercar el mundo de la empresa a los universitarios.

Los responsables de la compañía relataron a los alumnos cómo en los últimos años la competencia que ejercen otras empresas que contratan mano de obra barata en países como India ha obligado a implantar una creciente automatización en los procesos sencillos. Así, trabajos como la emisión de facturas ya se realizan a través de robots que se encargan de buscar los datos de los clientes y hacer por si mismos las tareas que podría hacer un empleado de carne y hueso. ¿La principal ventaja? "El ahorro enorme de tiempo, ya que permite que una tarea para la que se requieren diez minutos se solvente en apenas uno", sostiene la compañía, que ha apostado por no externalizar este tipo de servicios.

Deloitte también ha sido pionera en el desarrollo de edificios inteligentes como "The Edge", la sede central de la empresa en Amsterdam. Un edificio que conoce a todos sus empleados y sus agendas diarias gracias a los 28.000 sensores instalados en el recinto, y que con una aplicación en su smatphone les asigna un lugar de trabajo dependiendo de su jornada, favoreciendo las rotaciones y la interacción entre todos los empleados, además de ofrecer ventajas para la vida diaria: es capaz de recordar detalles como la temperatura del hogar o el tipo de comida que le gusta a cada uno de ellos e incluso les propone recetas de cocina personalizadas.

Del mismo modo, Deloitte también trabaja en el desarrollo de sistemas de gestión de activos que facilitan el control y la organización eficiente de proyectos, de tal manera que "aunque no seamos una ingeniería, necesitamos de perfiles de todo tipo para el desarrollo de nuestra actividad".

Deloitte forma de hecho a 2.500 personas cada año para trabajar en sus múltiples oficinas en todo el mundo. "Hay sitio para todos", garantizaron sus responsables a los alumnos.