El artista plástico Rodolfo Pico apareció muerto esta mañana en su estudio en el barrio de Laviada, donde también tenía su domicilio.

El pintor, nacido en Trevías (Luarca) en 1953, que era muy apreciado en el barrio, sufría ataques epilépticos, según explicaron comerciantes de su calle. Había sido echado en falta por algunos vecinos desde el pasado domingo, cuando no pasó por uno de los lugares a la hora que tenía por costumbre.

La Policía acudió al lugar hacia las diez de la mañana, ante el aviso de la asistenta del pintor, que no podía entrar al estudio por haber mueblesbloqueando la puerta. Al entrar, se localizó el cadáver del artista. Fuentes policiales apuntan a que la muerte se produjo al parecer por causas naturales y en las 24 horas anteriores al hallazgo del cuerpo. La asistenta que dio la voz de alarma es quien limpiaba su casa y estudio.

El artista era hijo de un hipano-cubano y llevaba años planeando viajar a la isla caribeña, donde tiene familia, según explicaba ayer uno de sus amigos.

El pasado 15 de enero, el Museo Evaristo Valle inauguró la última explisición de Rodolfo Pico, titulada "Una geometría sonriente".