Ignacio Murgui Parra (Madrid, 1972) es el concejal delegado de Coordinación Territorial y Asociaciones y segundo teniente de Alcaldía del Ayuntamiento de Madrid. En las últimas elecciones municipales, compareció en el número dos de la lista de Ahora Madrid, que lideró Manuela Carmena, actual alcaldesa de la capital de España. Ignacio Murgui está en política como independiente (no está afiliado a formación política alguna). Ayer, en el Museo del Ferrocarril de Asturias, fue uno de los ponentes de la jornada organizada por el Grupo Municipal de Izquierda Unida del Ayuntamiento de Gijón sobre "Gobierno local y democracia participativa".
-¿Qué conclusiones obtiene el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Madrid de la reciente experiencia de la consulta vecinal sobre asuntos como ampliar las aceras de la Gran Vía, el billete único para el transporte público o la remodelación de la plaza de España?
-En lo que se refiere a la participación de la gente, son unos resultados muy buenos, muy positivos. Hay que tener en cuenta que en las consultas han participado más de doscientas mil personas y en los foros locales, que es el espacio presencial que se habilitó para la deliberación y la participación en los distritos, se han inscrito en torno a las cien mil personas. En lo que se refiere a los foros, además de han constituido cientos de mesas de trabajo y el proceso se ha dado en un ambiente inmejorable de trabajo y de ganas de construir y llegar a acuerdos que es, precisamente, lo que esperábamos de este proceso. Nos ha sorprendido muy positivamente tanto lo que se refiere a la dimensión de la consulta ciudadana como lo que se refiere a la puesta en marcha de los foros locales.
-La oposición no es de la misma opinión, argumenta que los 212.000 madrileños que votaron no representa un porcentaje elevado sobre el total del censo llamado a las urnas, en torno al 8 por ciento...
-En un proceso participativo es una cifra que no tiene prececentes, por supuesto no tiene precedentes en Madrid, pero tampoco en nuestro país y, en términos relativos, además, creo que en pocas partes del mundo en procesos participativos de esta índole se ha llegado a porcentajes tan altos. Lo que es un error es tratar de atribuir y de medir los procesos de participación directa con los procesos de representación, que son distintos.
-La oposición también pone en solfa que se gastara un millón cien mil euros en la consulta...
-Se han puesto sobre la mesa los recursos necesarios para que el proceso de participación llegara a todo el mundo. Lo que no se puede hacer es decir que se ponen en marcha procesos de participación, que importa la opinión de los vecinos y vecinas y, luego, no poner los medios necesarios para que estos procesos arranquen. Hay que tener en cuenta que en una ciudad como Madrid durante tres décadas no se han habilitado procesos de participación ciudadana eficientes y, entonces, el nivel de estímulo que hay que poner sobre la mesa para que la gente decida volver a tomar la palabra es alto. Que se hayan puesto los recursos para que esto funcione habla a favor del proceso y de la apuesta del gobierno municipal por la participación ciudadana y por la escucha a los vecinos y vecinas.
-¿También es una manera de los concejales de "lanzar" la responsabilidad última a los vecinos?
-No, en absoluto, cuando un concejal decide someterse a la opinión de los vecinos y vecinas o cuando un equipo de gobierno decide hacerlo, es una decisión política, es decir, está siendo responsable de adoptar la decisión que tomen los vecinos, está siendo mucho más valiente y responsable que pensarlo sin consultar con nadie. Nadie trata de escabullirse de la responsabilidad, al contrario, se asume la responsabilidad de una decisión política, que es escuchar a la gente.
-Entonces, ¿sobran los programa electorales?
-No, dentro de los programas electorales, en nuestro caso, está precisamente poner en marcha los procesos participativos que estamos poniendo en marcha. Nosotros no estamos dejando de gobernar, lo que estamos haciendo es gobernar con democracia, incorporando a las decisiones políticas el parecer de los vecinos y vecinas de la ciudad.
-¿También podrán votar, por ejemplo, sobre los precios públicos?
-Van a poder decidir sobre casi todo, lo que pasa es que estos procesos están limitados por el marco normativo de las leyes; lo que no pueden decidir estos procesos ni los concejales es no cumplir con las normas. Los presupuestos municipales tienen una serie de limitaciones y los vecinos pueden presentar iniciativas populares que hagan referencia a los precios de determinados servicios municipales.
