Mejorar la sensación de seguridad subjetiva. Ese es siempre el objetivo de los responsables de la Guardia Civil y la Policía Nacional. Y si hay sucesos que puedan dar al traste con esa sensación de seguridad subjetiva esos son, sin duda, los atracos a bancos como el que esta mañana se vivió en la avenida de la Constitución y los robos en viviendas. Según los expertos en seguridad estos dos tipos de delitos "preocupan sobremanera a la población". A lo largo de los últimos años en Gijón se han producido varios asaltos que provocaron una importante alarma.

Asalto en rehenes en San Bernardo

En el año 2008 la Policía consiguió detener en Gijón tras un asalto con rehenes a un banco de la calle San Bernardo a Guiseppe Vivaldi, un ciudadano de nacionalidad italiana de 65 años que en su día fue definido por las autoridades como un "veterano atracador con numerosos antecedentes". El arrestado había viajado por toda España. Utilizaba varias idenntidades para dificultar su identificación y poder ocultarse. Vivaldi ya había actuado en los años 80 en Barcelona y Cornellá, en donde fue detenido hasta en siete ocasiones. En los 90 llegó a Asturias y fue detenido otras dos veces: una en Gijón después de atracar un banco de la playa Seis de Agosto del que se llevó 723.000 pesetas.

El asaltante "de barrio"

La Audiencia Provincial de Asturias condenó en el año 2015 a 14 años de cárcel a un atracador de bancos acusado de aslatar cuatro sucursales en Gijón. El primer suceso cuya autoría admitió el ladrón tuvo lugar a primera hora de la mañana del día 2 de marzo en la oficina de caja Rural situada en la calle Manuel Llaneza. Un trabajador del banco le dio al ahora condenado 1.090 euros. Dos días más tarde el asaltante se dirigió a la sucursal de Liberbank de la calle decano Prendes Pando en compañía de una cómplice que realizó labores de vigilancia. "Quiero que me des el dinero. Tengo un cuchillo y una pistola, esto es un atraco", le dijo el asaltante a la trabajadora del banco que le atendió. La mujer le aseguró al atracador que el dinero estaba guardado. El hombre cogió a un cliente y le puso una pistola en la cabeza. "¿Es que tengo que cargarme a alguien para que me des el dinero?", gritó poco antes de huir de la oficina. Una hora más tarde entró en el Banco Santander de la calle Río de Oro, en El Llano, en donde encañonó directamente a la directora del banco, a la que conocía por ser vecino de la zona y a la que obligó a abrir la caja fuerte, huyendo con 6.320 euros en efectivo. Su "modus operandi" era siempre similar. El atracador resultó ser un vecino de la zona en la que se produjeron los asaltos.

Dos ladrones vacían un cajero en unos segundos

En agosto del año 2015 la Policía Nacional registró un robo casi "de película" en un cajero de la calle Corrida. Una pareja aprovechó un descuido para llevarse 40.000 euros. Actuaron rápido y pasaron desapercibidos. La chica -que presentaba buen aspecto y tenía acento español según los testigos-, distrajo a la empleada que en ese momento se encontraba recargando el cajero situado en el hall de la sucursal. Mientras su compinche hablaba con la trabajadora el hombre aprovechó que la empleada estaba distraída para llevarse los cajetines en los que se distribuyen los billetes dentro del cajero. No hubo violencia pero eso no restó efectividad al golpe ya que los dos ladrones abandonaron la oficina con más de 40.000 euros en efectivo. No se descarta que en el suceso hubiera intervenido una tercera persona que estaría realizando labores de vigilancia fuera del banco, en el entorno de la plaza de Italia. Tras el suceso el banco se vio obligado a cerrar sus puertas para facilitar el trabajo de los investigadores del Cuerpo Nacional de Policía.

Asalta y banco y huye a pie

Pero no todos los atracos son tan "sofisticados". En septiembre de 2014 un vasco de 48 años asaltó a punta de pistola un banco de La Calzada. Se fue de la oficina andando y con un botín de 2.300 euros. Pero finalmente pudo ser detenido. No era ssu primera vez. Además intentó dificultar la operación policial tiñéndose el pelo y desplazándose a Oviedo.