Las plazas eran de auxiliares administrativos en el Ayuntamiento, y se relacionaban la totalidad de los miembros del jurado: el alcalde, el secretario municipal, el oficial mayor del Ayuntamiento y el director del Instituto de Jovellanos. Todos hombres. El día siguiente vemos que las pruebas habían sido de escritura, de aritmética, un dictado con análisis gramatical (no vemos nada de mecanografía) y una redacción.