Pasadas las 3 de la madrugada del viernes, dos agentes acudieron a un bar situado en la calle Sierra del Sueve, alertados por una pelea entre dos hombres.

Una vez personados en el lugar de los hechos, los policías mediaron en la acalorada discusión, apaciguando los ánimos y separando a los contendientes, momento en el que advirtieron que tanto uno como otro mostraban signos evidentes de encontrarse bajo los efectos del alcohol, razón por la cual los agentes exhortaron a los hombres a que volvieran a sus respectivos domicilios andando, sin conducir sus vehículos.

Aun así, uno de ellos, de 64 años de edad, hizo caso omiso de las advertencias y arrancó su coche, siendo interceptado por los agentes momentos después de iniciar la marcha.

La prueba de alcoholemia certificó lo que los policías habían advertido con anterioridad, arrojando una tasa de alcohol en sangre de 0,73 gramos por litro, superior a la permitida, por lo que fue detenido por un delito contra la seguridad vial.