Desincentivar el coche particular

El Equipo de Gobierno local del Ayuntamiento de Gijón tiene previsto aprobar en Junta de Gobierno el Plan de Movilidad 2016-2024 el próximo septiembre, previo al periodo de alegaciones durante el verano del documento, en cuyo diagnóstico se ha detectado la necesidad de disuadir sobre el uso del vehículo particular al tiempo que se requiere aumentar el uso de la bicicleta y el transporte público.

Así lo ha destacado el jefe de Tráfico del Ayuntamiento gijonés, Ignacio Díaz, durante la presentación del diagnóstico del Plan de Movilidad, en un acto en el que han intervenido la alcaldesa gijonesa, Carmen Moriyón (Foro), y el concejal de Seguridad Ciudadana y Movilidad, Esteban Aparicio (Foro).

Moriyón, por su parte, ha destacado el trabajo "exhaustivo" del equipo redactor del documento, que dará lugar a un modelo de movilidad. Se quiere, a este respecto, un pacto en torno a la definición de los objetivos este mismo mes o a principios de abril, como mucho. "Queda un mes de mucho trabajo", ha augurado la regidora.

De hecho, este mismo miércoles tendrá lugar una reunión del Foro de Movilidad. Díaz, en este sentido, ha explicado que en las próximas semanas se va a trabajar "intensamente" para mejorar la movilidad de Gijón.

En el mismo participan 76 entidades, de las que 17 son sociales-ciudadanas, 29 institucionales y 30 sectoriales. No obstante, está abierto a la incorporación de nuevas entidades. Además, han empezado a trabajar este pasado noviembre cinco grupos de trabajo.

En cuanto al diagnóstico, para el que se han realizado más de 1.500 entrevistas a personas de los 4 a 85 años,se ha detectado que en un día laborable se realizan 739.592 desplazamientos en Gijón, es decir, por habitante unos 2,64. Asimismo, Díaz ha señalado que se está notando diferenciaS de desplazamientos por distritos.

Además, casi el 37 por ciento (36,8 %) de todos los desplazamientos se realiza en vehículo particular, a lo que ha añadido que casi hay en la ciudad un coche por cada dos gijoneses. Por contra, un 52 por ciento se hacen andando o en bicicleta, aunque esta última no llega al uno por ciento. Por debajo de esa cifra, está un 11 por ciento del transporte público, del que un 8,2 por ciento lo hace en transporte público municipal, y el resto taxi. Es por ello, que hay un amplio margen para reducir el uso del vehículo particular.

En cuanto al desplazamiento más importante, es el que se hace al trabajo (27 por ciento), seguido de ocio (26 %), estudios (14 %) y compras. Sobre esto último, ha incidido en que las compras se realizan a pie o en bicicleta mayoritariamente. Al trabajo se realizan 142.614 de desplazamientos en vehículo particular de un total de 199.951, ha destacado.

Según él, por otro lado, hay tópicos que no se están comprobando. Por un ejemplo, al trabajo solemos ir en coche, algo que cree que habría que revertir, aunque a las compras se va más andando. También se ha observado mayores tráficos a la hora de entrada y salida del trabajo. Asimismo, existen diferencias por distritos en cuanto a los desplazamientos, de forma que el barrio del Llano (74 por ciento desplazamientos no motorizados) y el Centro son los de mayor uso de desplazamiento a pie, al contrario en barrios periféricos.

Díaz, asimismo, ha remarcado que Gijón es una ciudad "muy caminable", al ser compacta, lo que facilita "muchísimo" el uso de modos sostenibles de desplazamiento. Sin embargo, menos de un uno por ciento de los desplazamientos se realizan en bicicleta, y de estos el 38 por ciento es por motivos de trabajo.

Respecto al transporte público, con 60.641 viajeros diarios en la Empresa Municipal de Transportes Urbanos de Gijón (Emtusa), la red alcanza una cobertura a 300 metros de cada parada del 90 por ciento de la población, mientras que el 75 por ciento tiene a menos de 150 metros una parada.

En cuanto al uso de vehículo particular, con una media de 1,33 personas por vehículo, Díaz ha incidido en que este es "ineficiente y un derroche energético y de emisión de gases de efecto invernadero", a lo que ha abogado por revertir ese porcentaje.

Unido a ello, ha recalcado que Gijón es una ciudad "muy amable" con el vehículo particular, y eso hace un efecto llamada, según él. Y si bien ha reconocido que ahora ya existe el concepto de aparcamiento disuasorio para evitar que llegue al centro de la ciudad, ha resaltado que debe ser viable económicamente.

En otros aspectos, ha señalado que Gijón ya está empezando a dar síntomas de que se está saturando el tráfico, a lo que contribuyen los 263.737 viajes en vehículo privado en un día laborable. Entre las zonas más saturadas en ciudad está la rotonda del Llano y la de Justo del Castillo, así como la glorieta de Foro, pero también el eje de la carretera de la costa y Pablo Iglesias, lo que repercute en contaminación y ruido.

Desde el punto de vista de la accidentalidad, Díaz ha apuntado que el objetivo es muertos y heridos graves "cero". En este sentido, si 2015 fue un año "trágico", según él, en 2016 hubo 957 accidentes, con 392 heridos, 33 de ellos graves con dos víctimas mortales.

Referente a la Zona ORA, hay un problema por la reducción plazas. Aunque ha bajado un 14 por ciento el número de solicitudes, según él, se redujo en un 33,5 por ciento el número de plazas (4.856 plazas actuales). Para él, el Plan de movilidad va a cambiar el concepto de estacionamiento, al igual que ha visto preciso mejoras en la distribución de las mercancías en la ciudad, ya que la falta de control en zonas de carga y descarga crea problema de seguridad vial.

Díaz, además, ha considerado necesario empezar a gestionar la movilidad. Ha aludido, en este caso, a los 104.168 desplazamientos por estudios, a los que se suman más de 21.590 viajes que se producen como acompañamiento. También se va a incidir en los polígonos industriales, proponiendo medidas a empresas con más de 200 empleados. Todo ello para intentar reducir la contaminación, entre otras cosas, las 532,45 toneladas de CO2 que se generan a diario, el equivalente casi un edificio de 20 plantas.