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Diagnóstico sobre la movilidad en Gijón

La escasez de atascos y el aparcamiento fácil amparan la hegemonía del coche en la ciudad

El abuso del vehículo se potencia por la falta de alternativas para ir a grandes centros de actividad, alertan los técnicos

Tráfico en el cruce de las avenidas de la Costa y Castilla. ÁNGEL GONZÁLEZ

Revertir el protagonismo que el coche tiene en Gijón es uno de los retos que marcarán el diseño del nuevo Plan Integral de Movilidad Sostenible y Segura (PIMSS), que debe salir del consenso entre los técnicos, los políticos y los representantes de las 76 entidades vinculadas al denominado Foro de la Movilidad. Los datos estadísticos establecen que el 36,8% de los 739.592 desplazamientos que se hacen al día en Gijón se hacen en coche. Pero más allá de los porcentajes, los estudios técnicos presentados hasta el momento evidencian "la posición hegemónica del coche frente al resto de modos de transportes aún para recorridos donde el automóvil no es el medio de transporte más eficiente".

Los redactores de los documentos de prediagnóstico y diagnóstico del Plan de Movilidad encuentran en Gijón tres factores que favorecen el uso del vehículo privado. El primero es la falta de cobertura en medios alternativos para acceder a "grandes centros de actividad y zonas que atraigan viajes". Algo que se evidencia sobre todo en relación a los polígonos industriales u otros espacios de ubicación de empresas. En muchos casos los trabajadores no tienen más opción que el vehículo particular para acceder a su puesto laboral.

Otro elemento que favorece el uso del coche es que, de manera generalizada, los viales de la ciudad no sufren grandes problemas de saturaciones y atascos con lo que el automóvil se convierte en el modo de transporte más competitivo en cuanto a velocidad de viaje. Y un tercer elemento a favor es que no existen demasiadas complicaciones para encontrar aparcamiento en destino libre o de pago.

Así las cosas, y según los últimos datos, los 118.600 coches particulares censados en Gijón realizan una media de 272.374 viajes en un día laborable. Aunque la cantidad no es el gran problema. Es más el hecho de que esa jerarquía del automóvil impone una serie de necesidades y demandas incompatibles con ese "desarrollo sostenible, equilibrado y socialmente igualitario" que se busca ahora en las ciudades.

Problemas por barrios

El futuro Plan Integral de Movilidad también deberá dar respuesta a inconvenientes vinculados a territorios concretos. Los primeros informes del PIMSS hablan de "graves problemas de movilidad y cobertura" en Nuevo Roces y Cimadevilla. El primero como barrio de nueva creación carente de conexiones y el segundo como barrio emblemático y centro histórico de la ciudad que por su propia configuración urbana presenta una destacada problemática de accesibilidad universal. Y pensando en uno y otro barrio, respectivamente, hay que tener en cuenta su capacidad de atracción de muchas familias jóvenes con hijos y el proyecto de rehabilitación de la vieja Tabacalera para convertirla en gran complejo cultural y creativo.

Sin detectarse problemas de gravedad en esos casos, los estudios técnicos también fijan su atención en otras cinco áreas de la ciudad a las que habrá que dar un tratamiento específico en el Plan Integral de Movilidad: zona centro, Nuevo Gijón, El Llano, La Calzada y la zona rural. Del centro habrá que analizar el impacto de los procesos de peatonalización y en Nuevo Gijón se buscan nuevas conexiones por autobús, vías ciclistas e itinerarios peatonales. La envergadura de El Llano y La Calzada y la singularidad de la zona rural avalan sus estudios propios.

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