Ni pudieron sacar adelante su propuesta en la reunión del 23 de febrero, ni pudieron ayer. El Consejo Social le ha vuelto a poner el freno al proyecto de presupuestos participativos del gobierno municipal de Foro. Tras la experiencia piloto del año pasado que abrió a la decisión popular el destino de ocho millones en inversiones del Ayuntamiento -dos en los consejos de distrito y seis en los conocidos como presupuestos participativos-, el gobierno local se había puesto manos a la obra para poner en marcha ya el proceso de cara a las cuentas de 2018. El problema es que lo hizo sin tejer previamente alianzas con ninguna entidad. Y esa soledad se evidenció ayer en un Consejo Social que, por segunda vez, optó por decir no a la propuesta de Foro.

De hecho, el Consejo Social se ha hecho con el liderazgo del proyecto en detrimento de Foro. Por decisión de la mayoría de los reunidos ayer se creará una comisión específica del Consejo para debatir y generar un modelo de presupuestos participativos para la ciudad. Un "modelo Gijón" pensado para las necesidades concretas de la ciudad y que tenga proyección de futuro. La idea es que esa comisión quede constituida el martes que viene con un representante de cada entidad. Hacer encajar lo que decida esta comisión con los tiempos del presupuesto de 2018 será un problema al que tenga que hacer frente Foro.

Que el gobierno local llegaba a la reunión de presupuestos participativos sin apoyos se evidenció desde un primer momento. Sólo nueve de las 30 entidades que integran el Consejo decidieron responder a la encuesta planteada desde el gobierno para fijar las claves de la tramitación de ese dinero. Pero quedó más claro aún cuando las propuestas de Foro chocaron con un frente común conformado por la Federación de Vecinos (FAV), entidades sociales, sindicatos y los partidos de la izquierda municipal. De hecho en una votación final, Foro sólo consiguió cuatro votos a favor y tres abstenciones frente al no del resto de los presentes. "Han repetido escenario y nos han traído una propuesta inasumible. Vuelven a temas que ya habíamos superados y por eso el Consejo Social mantiene paralizado el proceso", explicaba Adrián Arias, presidente de la FAV.

Entre las críticas al diseño de Foro están por ejemplo, que elimine la denominada mesa de presupuestos participativos como motor de la operación o que incluya la posibilidad del voto negativo en la votación final del proyecto. Hay que recordar que las propuestas presentadas por este sistema tendrían que pasar un primer corte en la fase de apoyo ciudadano, además del aval técnico de su viabilidad, antes de poder ser votadas por vía telemática y presencial. Tampoco tuvo éxito la idea de fijar un mínimo del 3% de los votos emitidos para dar por buena la iniciativa En cuanto al dinero a destinar a este plan se mantienen los ocho millones de este año, aunque Foro propone que ahora tres se elijan directamente desde los consejos de distritos y queden cinco -uno menos que en 2017- para el sistema general de votación popular.

Arias evidenció también otros problemas. Desde la falta de una comisión de seguimiento que informe sobre el estado de las obras aprobadas para este año hasta el incumplimiento de la normativa que cede a los consejos de distrito el 2% del presupuesto total. Si no hay cambios, la FAV habla de boicot en las próximas citas de distrito.