Un joven de 27 años fue detenido este lunes a mediodía en las inmediaciones de un centro escolar de la zona de El Bibio por traficar con hachís en el barrio de la Arena, de Gijón.

Agentes de la Unidad de Prevención y Reacción de la Comisaría de Gijón realizaban un dispositivo de vigilancia y control en las inmediaciones de un bar del barrio de El Bibio -en el que habían intervenido en otras ocasiones por tráfico de estupefacientes- cuando, sobre las 13.30 horas del lunes, los policías vieron salir precipitadamente del mismo a un individuo que casi a la carrera abandonaba el lugar en dirección a la avenida Pablo Iglesias.

La conducta de esta persona levantó las sospechas de los policías que lo interceptaron y procedieron a su identificación. Los efectivos policiales pudieron comprobar mediante registro que en el bolsillo de su pantalón llevaba una tableta de hachís envuelta en papel transparente junto con 105 euros fraccionado en billetes de varios importes: 5, 10 y 20 euros.

En consecuencia, los agentes le detuvieron por un delito contra la salud pública al constatar que estaba ofreciendo la venta al por menor de esta sustancia. Y tras identificarle averiguaron también que el ahora arrestado había sido detenido en dos ocasiones en Bilbao y Gijón por reclamaciones judiciales.

Daños de 1.200 euros en motocicletas

Otros tres jóvenes de entre 17 y 21 años acabaron detenidos por la Policía Nacional después de causar daños por valor de 1.200 euros en cuatro motocicletas y un ciclomotor estacionados en la calle Donato la calle Donato Argüelles y Plaza de Europa, en el centro de la ciudad.

En la madrugada del sábado al domingo, a las 5,30 horas de día 19 de febrero, varios jóvenes habían causado daños a vehículos en la calle Donato Argüelles mientras fueron sorprendidos por un testigo de los hechos que aportó la descripción de las tres personas que había visto golpear farolas y mobiliario urbano y cómo tiraban motocicletas y ciclomotores a su paso, el último en las proximidades de la Plaza de Europa. Los desperfectos causados en el carenado y los retrovisores de los vehículos dañados ascendían a más de 1.200 euros.

Una vez recopiladas las denuncias de los perjudicados y los testimonios aportados por los testigos, los agentes del Grupo Primero de Policía Judicial lograron la identificación y detención de los autores que resultaron ser tres jóvenes de 21, 20 y 17 años que carecían de antecedentes y manifestaron haber estado de fiesta y no recordar haber causado los daños denunciados.