A última hora de la tarde de hoy, un conductor, de unos cincuenta años de edad y en patente estado de embriaguez, según testigos presenciales, colisionó con un semáforo en la gijonesa avenida de Castilla, a la altura de Torcuato Fernández Miranda.

Hasta el lugar de los hechos se desplazaron varios agentes de la Policía Local que insistieron para que el hombre bajase del vehículo, pese a lo que el conductor siguió intentando, en reiteradas ocasiones, arrancar el coche, que había sufrido importantes daños. Los agentes procedieron a levantar atestado del accidente y realizar el test de alcoholemia al conductor.