Le den uso o no, 26 de los 27 concejales de los seis grupos políticos que conforman la Corporación gijonesa son titulares de una tarjeta de aparcamiento. Solo consta la renuncia formal a esta tarjeta de Verónica Rodríguez, edil de Xixón Sí Puede y responsable de los temas de movilidad en su grupo municipal. El Ayuntamiento concede una única tarjeta de estacionamiento por edil y siempre vinculada a un coche determinado. Por eso en la tarjeta se concreta el nombre de la persona y la matrícula del vehículo. Los permisos se renuevan cada año.
El hecho de que la zona reservada para autoridades en el entorno de la Casa Consistorial sea muy limitada y que no se pueda usar la tarjeta para aparcar en Cimadevilla, llevó a poner a disposición de los ediles de la Corporación algunas de las plazas que el Ayuntamiento tienen comprometidas en el parking del Barrio Alto. Varios de los concejales aseguran que no la usan -hay quienes prefieren la bicicleta o caminar como reivindicaban ayer los portavoces Mario Suárez del Fueyo (XSP) y Aurelio Martín- y otros que limitan su uso al acceso a zonas reservadas. Y, por supuesto, que disponen de ellas sólo para actividades vinculadas a su trabajo.
A los concejales corresponde esa porción de las alrededor de 200 tarjetas de estacionamiento gratuito que se reparten en el Ayuntamiento, según la información facilitada por el gobierno de Foro. Por un lado tienen derecho a esta tarjeta los altos cargos directivos y por otro se dan también , según explican fuentes municipales, a los funcionarios que por su labor se ven obligados a realizar muchos desplazamientos a lo largo de su jornada laboral. A la hora de establecer la proporción hay que recordar que la plantilla estrictamente municipal ronda las 950 personas pero esa cifra se eleva a 1.240 si se suman los organismos autónomos -fundaciones y patronato- y a 2.500 personas cuando se computan también las empresas municipales. Muchas de esas empresas y servicios tienen una flota de vehículos a disposición de sus trabajadores para su labor.
Jueces, a pagar
El Ayuntamiento también facilita el acceso gratuito a la zona azul con este tipo de tarjetas a profesionales de los medios de comunicación, fundamentalmente fotógrafos de prensa y cámaras de televisión. La gestión de estas tarjetas se hizo a través de asociaciones profesionales. Otros colectivos perdieron hace muchos años esa opción. Por ejemplo, los jueces. Incluso más recientemente se les desestimó la posibilidad de poder gestionar alguna vía específica para facilitar el aparcamiento, siempre pagando, en el entorno del Palacio de Justicia.
Ahora mismo en la ciudad hay unas 4.800 plazas reguladas dentro de la zona azul y, según la memoria de gestión de 2016 de la Empresa Mixta de Tráfico, unas 5.400 tarjetas de residente de las que cinco mil son permanentes y el resto temporales. Los problemas de aparcamiento, sobre todo en el centro urbano donde la pérdida de espacios para el coche se ha incrementado por los procesos de peatonalización y semipeatonalización, son motivo de crítica vecinal constante.
