"Lo que más se aprende aquí es protocolo y el trato con el cliente". La joven ovetense Irene Mier, de 21 años, fue una de las once profesionales que ayer recibieron el diploma de la Agrupación de Camareros de Gijón tras finalizar su proceso de formación. Un año más tuvo lugar la tradicional espicha de fin de curso para celebrar la entrada de nuevos profesionales en el sector.

Irene Mier, estudiante de Geografía, quiso apuntarse para tener un mayor conocimiento del sector. "Suelo trabajar los periodos de vacaciones para ganarme un dinero, y es una buena manera de aprender en el trato con el cliente", comentó. También se apuntó este año Félix Samón, de 38 años y de origen cubano, y que se encuentra en el paro tras varios años trabajando en la hostelería. "Me sirve para aprender, mejorar y poder orientar mi futuro de cara al catering y ese tipo de servicios", resaltó.

El presidente de la Agrupación de Camareros de Gijón, Nicanor Fernández, resaltó que lo importante es "promocionar a la juventud y sacarles adelante, y que sepan servir en una boda o banquete" y añadió también que en la actualidad hay que "inculcarles la necesidad de tratar con educación al cliente".

En el curso, de dos meses de duración, aprendieron a trabajar con bandejas con copas, plaqués o servir con soperas.