Los vecinos del parque de La Serena, en el barrio de El Llano, han llegado ya a su límite después de tres meses de espera, desde el 14 de enero, cuando el Ayuntamiento valló todo el perímetro del parque para iniciar unas obras de mantenimiento y renovación de las que aún no hay avances palpables.
"Estamos hartos", claman los vecinos, "antes podíamos disfrutar del parque y ahora no podemos ni sacar al perro", enfatizan los habitantes de la zona. Aunque, sin duda, los grandes perjudicados de esta actuación del consistorio son los hosteleros que han visto reducido su espacio a "un angosto callejón", además de no poder colocar sus terrazas en una campaña tan importante para el sector como es la Semana Santa que, aseguran, "hemos perdido".
Lo que los vecinos no logran entender es "¿para qué han cerrado el parque con tanta antelación si las obras aun no estaban listas para empezar?", arguye un vecino de la zona que, desde su ventana, ve el lento avance de la obra. Por el momento, "únicamente se han podado los árboles, dejando las ramas en la pista, y se ha desmontado la pista deportiva y los bancos", explicita, sin mayor avance visible.
Los vecinos atribuyen este cierre al intento, por parte del consistorio, de acabar con los grupos extranjeros que se reunían en el parque, aumentando la inseguridad en el espacio, algo que no han conseguido ya que "únicamente se han esparcido por otros parques del barrio", aseguran los vecinos.
Fuentes municipales consultadas por este periódico en el día de ayer han asegurado que las obras en el parque ya están licitadas al servicio de Conservación Viaria, que será quien se encargue de realizar el total de las actuaciones. Además, el proyecto ya está realizado, por lo que desde el consistorio se confía en que las actuaciones puedan comenzar a principios del próximo mes de mayo, con una duración estimada de cuatro meses, concluyendo una vez finalizado el verano.
