Por cuarta semana consecutiva, padres y alumnos del colegio Montevil de Gijón se manifestaron frente al centro, cortando la calle Río Eo, para pedir la incorporación de un profesor de apoyo más para el centro, una reivindicación que, enfatizan, llevan "cuatro años solicitando".

"Ya no es una cuestión exclusivamente lectiva, lo que más nos preocupa es la seguridad", aseveró Layla Gutiérrez, vocal de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos, convocantes de la protesta, "si un niño sufre un accidente, por leve que sea, la profesora tiene que dejar el aula para ir a curarle, dejando a una veintena de críos sin nadie que los controle", algo que, aseguran, "va a terminar en desgracia".

Tanto es así que los tutores amenazan con suspender las salidas del centro ya que, si el único profesor de apoyo que hay para los más de 200 niños de las nueve clases de preescolar del centro va con un grupo de excursión, el resto de profesores "no pueden ni ir al baño, porque no quedaría nadie supervisando a los niños".

Una situación que se arrastra desde hace cuatro años, cuando se comenzaron a dar jubilaciones en el centro, especialmente en los cursos de infantil, sin que esas plazas se cubrieran, llegando a haber clases con casi una treintena de alumnos en el colegio, uno de los más copados de la región. "No vamos a parar hasta que el Consejero de Educación del Principado nos haga caso", arguyó Gutiérrez.

A la protesta acudieronrepresentantes políticos del Ayuntamiento, tanto del Partido Popular como de Xixón Sí Puede, quienes aseveraron su "total apoyo a las reivindicaciones" de los padres, así como su intención de continuar acudiendo a estas concentraciones hasta que se encuentre una solución.