Que la posición social influye a la hora de que las mujeres menores de 20 años afronten la maternidad parecía un hecho, pero ahora el Ayuntamiento de Gijón dispone de un estudio que lo acredita. La alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, presentó ayer las conclusiones del informe sobre las consecuencias de la maternidad en mujeres jóvenes gijonesas elaborado a raíz de una propuesta plenaria que el PSOE sacó adelante en diciembre de 2015 por unanimidad.

Este estudio, elaborado por los sociólogos Stefano De Marco y Daniel Sorando, asienta sus conclusiones en una entrevista personal y "en profundidad" realizada individualmente a 18 mujeres gijonesas que experimentaron la concepción de su primer hijo nacido con vida a una edad comprendida entre los 15 años y 20 años.

En la presentación de las conclusiones desprendidas de estas 18 entrevistas participó Daniel Sorando, uno de los autores del estudio. Según los datos que maneja, estos embarazos suponen un abandono prematuro de la escuela -a veces lo dejan antes de quedarse embarazadas- pero también el deseo de retomar los estudios una vez son madres aunque no siempre disponen ni de medios ni de tiempo para ello.

Otros de los problemas advertidos es la estigmatización que hace la sociedad de las mujeres jóvenes que dan a luz que les provoca una sensación de "ser malas madres e irresponsables" y el miedo que pasan a enfrentarse a sus familias, ya sea para dar a luz o para abortar.

Por otra parte, los únicos datos ofrecidos sobre la tasa de embarazo en mujeres menores de 20 años en Gijón son relativos al periodo comprendido entre los años 2012 y 2013. Esos datos, provenientes del Observatorio de Salud de Asturias, situaban a Gijón con una media de 2,58 embarazos por cada mil mujeres menores de 20 años, por debajo de los registros de Oviedo (3,08), Avilés (2,92) y la media de la región (2,67).