Un menor de 17 años, vecino de la zona sur de Gijón, fue detenido por la Policía Local tras supuestamente protagonizar en casa un episodio de violencia doméstica el pasado domingo, en una jornada que, paradójicamente, era de celebración familiar por el Día de la Madre. Los agentes que se personaron en el lugar de los hechos se lo llevaron arrestado después de que hubiese agredido a su padrasto, además de destrozarle el coche, según el relato policial del que ha informado el Ayuntamiento.

Los agentes recibieron una llamada pasada ya la medianoche del Día de la Madre, a las 0.54 horas, en la que un vecino les alertó de que un individuo estaba causando daños en un coche estacionado en la calle San Nicolás. Según informó el Ayuntamiento, una patrulla de la Policía Local se personó en el lugar de los hechos de forma inmediata y "hechas las investigaciones correspondientes averiguó que en el domicilio del detenido había habido una discusión familiar con su hermana y la madre de ambos".

En la tensa riña, siempre según el relato de la Policía Local en base a la recogida de testimonios, "intentó mediar" el padrastro de los niños y actual pareja de su madre con el fin de poner fin a la disputa. Sin embargo, "el joven le agredió y le amenazó con destrozarle el coche".

Y así ocurrió. Cuando el padrastro bajó a la calle se encontró que "su vehículo tenía el espejo retrovisor roto, desperfectos en la puerta y rota la luna trasera, un cristal que el joven rompió con un ladrillo que se encontraba en el interior".

Una vez estudiada la situación y evaluados los hechos ocurridos en la casa y fuera de ella, los agentes de la Policía Local decidieron detener al menor de 17 años por un delito de violencia doméstica.