Resuenan tambores de guerra en el movimiento vecinal. Durante meses sus quejas por el funcionamiento de los consejos de distrito han caído en saco roto y la rebelión ha estallado: incluso las asociaciones más críticas con la directiva de la federación vecinal (FAV) han acudido a su llamada para pasar a la acción y plantar al Ayuntamiento en el principal organismo de participación ciudadana.

Lo vivido ayer en la Casa Consistorial fue un alarde de unidad del movimiento vecinal urbano. A la cabeza, Adrián Arias, presidente de la FAV, secundado por una veintena de representantes de diferentes barrios. No fallaron ni Laviada, ni El Natahoyo, ni El LLano; colectivos vecinales que mantuvieron en su día discrepancias con la directiva de Arias. Pero ahora toca remar todos juntos, porque todos están de acuerdo en que a lo largo de los últimos años, y con Foro en el poder, a los consejos de distrito "se les ha ninguneado y se les deja morir". Arias lo dejó claro: "Es una situación lamentable. A nosotros nos duele mucho no asistir a estos procesos que sentimos como propios, que fueron nuestra conquista".

Sin embargo, Arias aseguró que "hemos sido muy pacientes y respetuosos", manteniendo su participación pese al caso omiso del gobierno local hacia sus quejas. "Pero llega un momento en que tenemos una responsabilidad con nuestros vecinos. El silencio por respuesta desde la institución municipal no viene sino a refrendar esta postura. Queremos iniciar una reflexión profunda de hacia dónde tienen que ir esos espacios de participación. En tono propositivo, no negativo", aseguró.

Los representantes de las asociaciones de vecinos no acudirán a las convocatorias de consejos de distrito hechas por el gobierno local. También hablarán con otras entidades gijonesas -no vecinales pero que también tienen representantes en los consejos- para que se sumen a su batalla. Arias recordó que a los consejos de distrito ya no se llevan muchos asuntos. "Cada año nos solían presentar los presupuestos municipales; este año no los hemos conocido ni en un powerpoint", agregó el portavoz de la federación.

La federación vecinal urbana, que también intentará sumar a la rural a su iniciativa, lanza tres exigencias para levantar su plantón a los consejos de distrito. En primer lugar, "la imprescindible reforma del Reglamento Municipal de Participación Ciudadana 2008", convocando reuniones con el tejido asociativo para ello. En segundo lugar, "la reforma y mejora de los procesos de funcionamiento de los consejos de distrito, con el objeto de recuperarlos como órganos de deliberación, debate y decisión".

Y en tercer lugar, el "cumplimiento riguroso de las inversiones y proyectos decididos en procesos de participación", dado que la FAV lamenta que Foro no esté ejecutando inversiones acordadas en consejos de distrito y otros mecanismos de participación. Arias apuntó como responsables a las concejalías de Participación Ciudadana y de Hacienda. De hecho, reclamó que "Moriyón se ponga al frente para resolver esto" así como que la oposición, que es mayoritaria frente a Foro, también presione.

Consejo social

Las reivindicaciones de la FAV debieron llegar rápido a oídos de Moriyón. Por la tarde se reunía el consejo social para tratar el borrador de la segunda edición de los presupuestos participativos, en los que los ciudadanos proponen inversiones y luego votan para elegirlas. Ese borrador suponía "una tomadura de pelo" para las asociaciones, pero en el consejo social Foro aceptó su principal reclamación: que los consejos de distrito puedan plantear inversiones que vayan directamente a la votación final.