El equipo de gobierno de Foro cumplió con el compromiso adquirido con la oposición pero no lo avaló con su voto. La concejala de Hacienda, Ana Braña, presentó ayer en una comisión extraordinaria de su área y como paso previo a su inclusión en el orden del día del Pleno de la próxima semana, la modificación presupuestaria que eleva de 100.000 a 175.000 euros el dinero asignado para este año al convenio de colaboración con los organizadores de la "Semana negra". Esta subida de 75.000 euros sobre el dinero inicial reflejado en el presupuesto municipal se financia gracias al fondo de contingencia del Ayuntamiento. Aunque la modificación se presenta como iniciativa del equipo de gobierno, a la hora de la votación los representantes de Foro optaron por la abstención. Así que la propuesta salió adelante gracias a los votos favorables de los tres partidos de la izquierda: PSOE, Xixón Sí Puede e IU. Los ediles del Partido Popular y Ciudadanos votaron en contra.

La tramitación de esta modificación presupuestaria no supone, en ningún caso, que los responsables del veterano evento vayan a tener acceso ya a ese dinero. De hecho, hasta que no puedan demostrar ante el Ayuntamiento que han solventado sus problemas con Hacienda ni podrán recibir la subvención pendiente de cobro de 2016, ni firmar el convenio de este año. Esta imposibilidad de ejecutar ya esos recursos fue el argumento que usó Foro para justificar la abstención.

Mientras, desde la "Semana negra" se confía en cerrar en breve un acuerdo con una entidad bancaria en favor de un préstamo que les permitiría regularizar su situación con Hacienda, que les reclama alrededor de 100.000 euros. A esa deuda se suma otra de unos 200.000 euros con proveedores. Elevar la ayuda municipal y sostenerla en el tiempo es una de las claves del plan de futuro pensado para la "Semana negra", que tiene pendiente de presentar su programación para este año. La cita, en principio, está fechada entre el 7 y el 16 de julio, en El Natahoyo.

"Es un paso adelante pero no se despejan todas las dudas que hay sobre el festival", explicaba tras la comisión el portavoz de Xixón Sí Puede, Mario Suárez del Fueyo. Para parte de la oposición los problemas que ahora tienen los organizadores de la "Semana" están motivados por el impago municipal de la subvención de 2016, que era el dinero que se tenía pensado dar a Hacienda en un pacto de fraccionamiento de deuda. Al incumplir con el pago previsto en noviembre, ahora Hacienda exige el total de la deuda.

"Nosotros somos unos firmes defensores de la 'Semana negra', que forma parte de la vida de Gijón. Quien no va un día, como a la Feria de Muestras, aunque sea para criticarlo", ironizó la edil de IU Ana Castaño antes de denunciar con firmeza que "este año estamos al filo de que no haya edición y eso sería lamentable". "Esto es un negocio con un presupuesto de más de 600.000 euros. Si después de 30 años aún siguen necesitando que el Ayuntamiento les de 175.000 euros es que lo gestionan muy mal, o es pedir por pedir", explicó el edil popular Pablo González para justificar el voto contrario de su grupo. Para José Carlos Fernández Sarasola, de Ciudadanos, la decisión de ayer fue "un brindis al sol".

En cuanto al nuevo convenio, la "Semana negra" se verá favorecida por el cambio de condiciones pactado en el Pleno para evitar las trabas burocráticas y demoras en los pagos de las ayudas municipales que han ido poniendo en riesgo a muchas entidades de la ciudad. Por ejemplo, ya no será necesario justificar el total del presupuesto sino la cuantía a subvencionar y se facilitarán los adelantos. La idea es conseguir que todo el dinero que se compromete en cada convenio acabe llegando a la entidad.

Por otro lado, en la comisión extraordinaria de Hacienda compareció el edil forista Jesús Martínez Salvador en su calidad de presidente del Patronato Deportivo Municipal. La oposición le exigía explicaciones sobre el expediente con 132.000 euros en facturas pendientes de pago que ha presentado la entidad dentro del cierre de cuentas de 2016. "No vamos a poner obstáculos porque detrás hay empresas afectadas que tendrán que cobrar. Pero es una advertencia de cara al año que viene: más rigor", resumió Ana Castaño (IU).