El Ayuntamiento deberá indemnizar con 17.638,89 euros a una mujer que se rompió una pierna y sufrió concusiones en la cara y la rotura de sus gafas al caer en el interior de un agujero que había quedado en la acera tras la retirada de una farola o semáforo. La mujer, que caminaba acompañada por su hija y ayudándose con un bastón, tardó 259 días en curar sus lesiones, de los que 120 días estuvo impedida para realizar sus tareas.

El juzgado de lo contencioso de Gijón dio la razón a la mujer, que había impugnado la decisión del Ayuntamiento de pagarle sólo la mitad de los daños al considerar que la víctima tenía parte de culpa en el accidente. El Ayuntamiento aportó grabaciones de las declaraciones tomadas en sede administrativa a la hija y otra testigo del accidente, en las que el Consejo Consultivo apreció contradicciones.

La sentencia no lo ve así. Recuerda que las testigos señalan que aunque el día estaba despejado, el sol les daba de frente, dificultándoles la visibilidad. El fallo también señala que la mujer cayó en la acera, lo que demuestra que no tenía intención de cruzar la calle por ese lugar. "Ninguna culpabilidad cabe atribuir a la recurrente que paseaba por una acera, esto es, por un lugar especialmente habilitado para el paso de peatones y en el que éstos circulan en la confianza legítima de que la misma se encuentra en correctas condiciones de conservación y seguridad, lo que no ocurría en el caso de autos", señala la sentencia.