Señor Concejal, nos dirigimos a usted con motivo de los sucesos que tuvieron lugar la semana pasada en la plaza de Arturo Arias en el barrio de Cimavilla, relacionados con la celebración del aniversario de la sidrería El Lavaderu, en los que resultaron sancionados el presidente y el director de la Banda de Gaitas de Gijón. Como son cuestiones ya muy comentadas y suficientemente conocidas, no entraremos en los detalles concernientes a discernir quién tiene razón, si hubo o no apercibimiento o si es que diste un Do en vez de un Si bemol. Y con motivo también, por supuesto, al expediente policial abierto a causa de la función escolar del colegio Virgen Reina.

Nosotros, en primer lugar ciudadanos, sentimos la necesidad de vivir precisamente en una ciudad viva, en la que en los espacios públicos (que son de todos) se respete por supuesto la convivencia y en la que también se pueda sentir la emoción de la música o cualquier expresión artística durante todo el año, no sólo cuando gana el Sporting o pasa algo extraordinario...mire usted, las condiciones climatológicas en Asturias son las que son, así que en la calle pocos días al año podemos disfrutar de eventos de estas características. Fuimos una ciudad admirada en ese sentido, hoy somos conocidos por las despedidas de solteros.

El día de autos sentimos vergüenza y rabia, sobre todo por la imagen que les estábamos dando a nuestros niños, porque la emoción que se les notaba por estar viendo y oyendo música de repente se vio transformada en una actuación policial. ¿Qué queremos para las futuras generaciones, policías actuando o músicos interpretando? Nosotros opinamos como Voltaire: "no hay recuerdo sin emoción"; así que preguntémonos: ¿Qué queremos que recuerden?. Piénselo.

Nos preocupa la escasa sensibilización de las diferentes administraciones públicas de esta Comunidad Autónoma para con la música y los músicos; continuamente vemos como se retuercen las leyes y las normas hasta hacerlas sangrar para evitar que la música en directo sea una realidad viva para todos en nuestra sociedad.

Mire usted, Sr. Concejal: para gobernar una ciudad hay que conocerla, y respetarla. Hay que conocer y respetar todas sus realidades. Y la música en directo es una realidad con muchas expresiones. Y usted, ustedes, tienen la obligación de dotar a los ciudadanos de espacios y tiempos en los que todas esas expresiones tengan cabida. Y en vez de eso están estrangulando sistemáticamente la posibilidad de que la música, fundamentalmente aquella que producen una excepcional generación de músicos asturianos, llegue a todos los ciudadanos durante todo el año.

Usted dice que la ley es igual para todos, pero no es cierto. En breve, y por varios meses, esta ciudad se convertirá en un paraíso de la perturbación del descanso y la tranquilidad de los vecinos y viandantes. Eso sí, en espacios y horarios especialmente habilitados para ello. Habilitados por ustedes.

Firman, entre otros: Miguel Uría, Lidia López, Colectivo Asturiano de Jazz, Caja de Músicos, Colectivu de Música Tradicional Xixonés, TresBuiTres, Cooperativa el Ñeru, Alderiques d'Asturies, Banda de Gaites Villa de Jovellanos, Banda de Gaites Villa de Xixón, Banda de Gaites La Magüeta, Charanga Ventolín, Charanga Paentemala, Fanfarria Pepe el Chelo, Francisco Lozano (Músicas Sin Prejuicios, Radio PRA), Gavi Vino (El Desván del Guaje, Radio PRA)