Arcelor-Mittal contempla como "alternativa viable" bombear hasta Avilés las aguas que use en el proceso industrial de las baterías de coque de Gijón, en el caso de que no fuera posible verterlas en el colector de aguas industriales de Gijón. Entre otras cosas, las baterías utilizarán agua para el apagado del coque tras el deshornado.

Entre las medidas impuestas por el Principado en la Declaración de Impacto Ambiental, figura que las baterías de coque de Gijón no podrán reiniciar su actividad hasta la entrada en servicio del Colector Interceptor General del río Aboño. La obra de este colector de aguas industriales, construido por el Principado, había concluido en 2012, pero una modificación legal que se produjo ese mismo año impidió su entrada en servicio, obligando a hacer modificaciones en el mismo. El colector se había construido con aliviaderos para situaciones de elevado caudal, algo que quedó prohibido con la nueva legislación.

Aunque Arcelor considera como alternativa viable bombear el agua, tras un tratamiento previo, hasta las instalaciones siderúrgicas de Avilés, considera que "no será necesario dado el avanzado estado de ejecución del colector".