Los agentes de la Policía Nacional tuvieron que hacer frente el pasado sábado a un suceso poco usual. Un joven de 19 años y vecino de Noreña fue arrestado por los agentes por sustraer una silla de ruedas y causar daños a un vehículo con ella.

Los hechos tuvieron lugar el sábado en torno a las 11 de la mañana, cuando el propietario de un automóvil que se encontraba estacionado en la calle Marqués de Urquijo se encontró con una desagradable sorpresa . El hombre alertó a los agentes policiales al percatarse de que dos jóvenes le habían causado daños en el lateral del copiloto del coche tras impactar contra él con una silla de ruedas. Los policías se desplazaron rápidamente al lugar, y a su llegada uno de los jóvenes había huido. El otro, en cambio, fue retenido por los funcionarios.

Tras ser interrogado acerca de la procedencia de la silla de ruedas, dijo a los funcionarios de la Policía que se la había encontrado da manera fortuita en el parque de los Pericones. Poco después el joven decidió cambiar la versión inicial para confesar finalmente que la había sustraído en un portal. Los agentes llevaron a cabo las comprobaciones pertinentes para determinar la propiedad de la silla de ruedas, y pudieron averiguar que pertenecía a una mujer y que había sido sustraída de un portal del barrio de la Arena, en el que también residiría su propietaria y usuaria.

La silla, eléctrica, estaba valorada en más de 5.800 euros, y los daños causados al coche ascienden a más de 700 euros, según las estimaciones iniciales. El arrestado por estos hechos tenía antecedentes policiales como presunto autor de diversos robos, tal y como pudieron comprobar los agentes tras su detención.

No es el único caso de daños a los coches estacionados registrado en la vía pública en Gijón en los últimos días. De hecho, un joven de 20 años fue detenido la semana pasada, tras arrasar con los retrovisores de decenas de vehículos estacionados en una calle del barrio de Roces después de discutir con su pareja.

La discusión tuvo lugar de madrugada y además de retrovisores también se vieron afectadas algunas lunas de los coches aparcados en la calle Benito Otero Martínez, que también fueron reventadas por el joven en su ataque de ira, por lo que los daños materiales fueron cuantiosos. El arrestado en este caso también tenía antecedentes por robos.