Aptitud e improvisación fueron las notas musicales predominantes de la batalla de gallos que tuvo lugar ayer en el festival Metrópoli , donde los raperos de "Freestyle": "Skone", "Chuty" e "Invert" y el productor "Dj Hazhe" desplegaron sobre el escenario una batalla campal donde palabras, estrofas y rimas fueron directas como dardos a sus oponentes. A pesar de que en algunas ocasiones la temática pudo no ser la más adecuada para el oído de los más pequeños de los presentes -había niños de 12 y 13 años- , el público vitoreó y levantó manos y brazos cada vez que los artistas apelaban a sus seguidores.

Los raperos improvisaban sus letras en base a nombres de videojuegos que los asistentes pronunciaban. Adolescentes y adultos aficionados a la cultura hip-hop y el "Freestyle" acogieron desde su salida al grupo, "Freenetiks", cuyos artistas atesoran una trayectoria musical memorable en el mundo del "Freestyle" en nuestro país y fuera, poseedores de dos premios mundiales de la conocida batalla internacional de gallos patrocinada por Red Bull, y de otras muchas victorias nacionales.

Los tres artistas se refirieron al público gijonés como "familia", y dedicaron una de sus estrofas al entrenador fallecido del Sporting, Manolo Preciado. "Lo bonito de hacer rap es toda la gente que allí donde vamos siempre nos está apoyando" sentenció uno de los raperos. También dedicaron otra serie de frases a su público más lejano de China, Japón y Sudamérica: "Un japonés me pidió que le dedicase uno de nuestros temas de Freenetiks" aseguró el rapero Invert, antes de comenzar con sus siguientes rimas.

Trombas de aficionados del "Freestyle" llenaron el escenario principal y sus alrededores, desde donde pudieron disfrutar, más lejos, del espectáculo a través de dos pantallas colocadas a ambos lado del escenario que enfocaban a los artistas en cada una de sus entradas. El ritmo no faltó en ningún momento, todo el mundo bailaba al son de los "beats" (base instrumental) que hizo de acompañamiento a cada una de las palabras que por segundo disparaban los cantantes y dejaron anonadados y con ganas de más a sus seguidores, como Benjamín Martínez, un educador de 29 años cuya petición al patrocinador de las batallas de gallos fue clara: "Sería impresionante que `Red Bull´ trajera a Gijón una ronda clasificatoria del campeonato como ha hecho en otras ciudades".

El primer grupo de Freestyle en España no sólo dio la talla sino que se dejó la respiración y la garganta en Gijón.