El equipo directivo del IES de Roces ya puede marchar de vacaciones con alivio. El Consejo de Gobierno del Principado autorizaba ayer la contratación y el gasto para las obras de ampliacion de su centro. Muy necesarias, que se vieron frenadas por la prórroga presupuestaria del pasado año, y que tuvieron que superar el intento de la Consejería de acelerar los tiempos de la obra y abaratar la misma recurriendo a módulos prefabricados. La oposición de la comunidad escolar y vecinal frenó el proyecto, para el que también se valoró el uso de espacios temporales en el colegio Manuel Medina. Finalmente será el proyecto inicial el que saldrá adelante, el que planteaba ampliar un ala del actual edificio, buscando la máxima integración funcional. Los trabajos cuentan con un presupuesto de licitación de 692.706 euros y se prolongarán seis meses, de tal forma que la dirección no cuenta con que estén en uso hasta el curso 2018-19. Así se dotará al centro de cuatro aulas más y un taller polivalente.
Con la obra se va a dar respuesta al incremento importantísimo de alumnos que ha tenido el IES de Roces en los últimos años. Si en el curso 2010-2011 había 17 unidades y 336 alumnos, el curso que acabó lo hizo con 22 unidades y más de 500 alumnos. Y para el próximo están previstas 24 unidades -que podrían ser 25-, y unos 550 estudiantes. "Hice un estudio de la zona y sabíamos que este año no había acabado aún el crecimiento. Estamos muy necesitados de espacio", reconoce Alberto García, el director, que cuenta que, sin transición "el instituto pasó de tener línea dos, con dos aulas por curso, a tener línea cuatro". Hace un año ya se hicieron obras de reforma interior para ganar cuatro espacios y para el próximo curso "volveremos a vivir con estrecheces, pero al menos con el horizonte ya definido se asume mejor", dijo el director.
