Roja y con la palabra Gijón en letras bien grandes. Así es la imagen de la tarjeta bancaria con la que los beneficiarios de la nueva renta social podrán ir a comprar a los comercios gijoneses adscritos a este nuevo programa de la Fundación Municipal de Servicios Sociales. Ahora mismo, y tras más de 600 contactos realizados desde la Unión de Comerciantes, hay 227 negocios gijoneses vinculados a la iniciativa, que cuenta con Caixabank como tercera pata para su desarrollo.

El proceso de adhesión de comercios no está cerrado aunque ya se ha superado el umbral de los 200 que se habían marcado como objetivo los responsables de la Unión de Comerciantes. Dos datos para analizar el interés del empresariado local en esta singular iniciativa: entre los negocios adscritos hay un reparto casi al 50% entre socios y no socios de la Unión y, otro, aunque el mayor número de los que se han sumado a este proyecto se encuentran en la zona centro y La Calzada no hay ningún barrio que quede fuera de la influencia de la tarjeta de la renta social.

Por líneas de producto, el mayor número de comercios adheridos a la renta social tienen que ver con la venta de ropa (81), luego están las firmas de electrodomésticos y mobiliario básico (38) y las tiendas de calzado (29). También hay firmas dedicadas a equipamiento deportivo, equipamiento del hogar, venta de medicamentos, reparaciones en la vivienda y material odontológico, audiológico, ortopédico y oftálmico.

Más que un canal de pago

Todos esta información la facilitaba ayer David Argüelles, presidente de la Unión de Comerciantes, en un acto oficial de presentación en la Casa Consistorial donde también estuvo en representación de Caixabank Iván Ardura y donde la edil de Bienestar Social, la forista Eva Illán, se hizo acompañar de varios concejales de Xixón Sí Puede e IU como muestra de la estrecha vinculación de ambos grupos políticos con esta iniciativa.

De paso, Argüelles mostró las primeras imágenes de la web comprasrentasocialgijon.es donde tanto los comerciantes como los beneficiarios tendrán acceso a toda la información del programa y servirá como herramienta de trabajo en la facturación de las ventas.

Lo que no se pudo ver ayer en el salón de recepciones del Ayuntamiento fue la tarjeta de una manera material. La idea del banco es que las primeras puedan estar operativas en agosto y el sistema este operativo al cien por cien en el mes de septiembre. "Esta tarjeta no es solo un canal de pago que sustituye a los vales o los cheques, es otra forma de entender las ayudas sociales donde no se estigmatiza a quien la usa para comprar y se garantiza que el dinero se emplea en la finalidad para la que fue concedida la ayuda", explicaba Ardura. Mientras se completa el entramado técnico entre comercios y banco, Servicios Sociales seguirán recogiendo solicitudes y haciendo las valoraciones de cada caso. Ahora mismo hay 364 concesiones sobre 532 valoraciones de un total de 3.488 peticiones de ayuda.