Gobierno y oposición debatirán el martes en el Pleno la idoneidad de impulsar desde el Ayuntamiento, y más en concreto desde Divertia como empresa municipal responsable de los festejos y el turismo, una planificación de los eventos festivos que facilite distribuirlos" a lo largo de el año y por toda la ciudad". El debate lo propicia una iniciativa de Ciudadanos, que ayer presentaba su edil José Carlos Fernández Sarasola. La Junta de Portavoces se reúne esta mañana para concretar las propuestas que llegan finalmente a votación.

Para Ciudadanos el punto de partida de esta propuesta de ordenación festiva sería la constitución, y ese es el principio de acuerdo que se lleva al Pleno, de una mesa de trabajo en la que, entre otros, estarían OTEA como patronal de la hostelería y la hotelería, las federaciones de vecinos, la Cámara de Comercio y los representantes de Divertia. Y el objetivo, cuadrar un calendario de eventos para el 2018. Asumiendo que hay actividades festivas vinculadas a una fecha concreta y eventos con agenda ya cerrada, Sarasola entiende que queda margen para que ni todo se concentren entre julio y agosto. Ni todo se haga en la misma ubicación, por ejemplo el entorno de la playa de Poniente.

La distribución de los eventos en el calendario tendría una doble virtud. Por un lado, dice Sarasola, se evitarían los efectos negativos sobre la hostelería local que genera esta competencia en la etapa más turística del verano y, al tiempo, habría nuevos alicientes para desestacionalizar la llegada de visitantes. Uno de los grandes retos del turismo local. Y en cuanto a la distribución territorial serviría para favorecer la actividad de algunos barrios y rebajar la presión sobre los vecinos de las zonas donde ahora se concentra la actividad festiva.

Para Sarasola el control sobre esa planificación festiva debe ser municipal ya que muchos de los eventos los impulsa el propio Ayuntamiento y, los que se organizan desde ámbitos privados, suelen contar con el apoyo de la administración municipal a través de subvenciones o cesiones de espacios públicos.

No es la primera vez que alguien plantea la necesidad de ordenar los eventos de ocio en Gijón. Hay quejas vecinales, de los hosteleros locales y, este verano, también de los organizadores de alguno de esos eventos. "Lo que pretendemos es poner un poco de orden y raciocinio. No estamos en contra de la competencia pero hay que articular medidas para que el daño que se ocasione al sector hostelero local sea el mínimo posible y, a poder ser, generar sinergias de las que todos nos beneficiemos", indicó Fernández Sarasola en la exposición de su iniciativa plenaria.