En una tablet y con firma biométrica, la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, y los representantes de nueve colegios profesionales de Asturias rubricaban ayer los convenios de colaboración que permitirán a 6.000 colegiados representar a sus clientes en procedimientos electrónicos del Ayuntamiento de Gijón con el único requisito de partida de una declaración responsable. El nuevo sistema, que se mantiene abierto a otros colectivos, ha sido suscrito por los colegios de abogados, administradores de fincas, arquitectos, aparejadores y arquitectos técnicos, economistas, gestores administrativos, graduados sociales, ingenieros industriales e ingenieros técnicos industriales.

Es un paso más en, por un lado, el cumplimiento de las obligaciones que impone la nueva legislación sobre procedimientos administrativos y, por otro, el camino que se autoimpuso hace años el Ayuntamiento gijonés en materia de administración electrónica. Uno de los beneficios de esta nueva vía de representación profesional se dejará sentir en las gestiones vinculadas al nuevo sistema de concesión de licencias y autorizaciones que Te Crea acaba de poner en marcha para simplificar trámites a través de las figuras de la declaración responsable y la comunicación previa.

Ana Braña, concejala de Hacienda y Organización Municipal, explicaba ayer que desde la entrada en vigor de la nueva ley, en octubre del año pasado, el Ayuntamiento gijonés tramitó por vía electrónica más de 21.000 expedientes, 16.000 resoluciones, 172.000 documentos administrativos y 15.600 registros. Sólo el uso del registro electrónico ha visto incrementado su uso por cinco.

La tramitación electrónica supone ahorros de tiempo, desplazamientos y dinero. Sobre una media de 45.000 notificaciones anuales a personas jurídicas, Braña calcula que se conseguirá un ahorro de 180.000 euros y una reducción del plazo de notificación de los actuales casi 20 días a unos diez como máximo.

Ya que la relación por vía telemática es una obligación para muchos colectivos, el Ayuntamiento ha desarrollado un proceso de formación con 50 talleres teóricos y prácticos a los que se sumarán otros 60 en los próximos meses. Además, se han enviado más de 8.200 cartas informativas a los colectivos afectados y hay un sistema de apoyo con colaboradores de la Universidad de Oviedo que han ayudado en los dos últimos meses a unas 400 personas.