El Ayuntamiento de Gijón, o por lo menos así lo indicó ayer la Alcaldesa, no tiene previsto paralizar el contrato para la redacción del proyecto, dirección de las obras y coordinación en materia de seguridad y salud de la futura comisaría de la Policía Local pese a las críticas del Colegio de Arquitectos. Hasta el próximo lunes está abierto el plazo para la recepción de ofertas a una licitación con un coste de 173.000 euros. El nuevo equipamiento policial estará en el entorno del Palacio de Justicia. La polémica saltó tras la decisión del Colegio Oficial de Arquitectos de renunciar a participar en el proceso de selección del ganador del concurso "porque el precio de licitación es muy inferior al alcance de los trabajos exigidos". Carmen Moriyón defendió que los criterios del contrato contaban con el aval de los arquitectos municipales.