Un joven de 18 años fue detenido por la Policía Nacional acusado de forzar el acceso a un gimnasio del barrio de Viesques causando daños de unos 1.000 euros para apoderase de unas prendas deportivas cuyo coste no ascendía ni a los 70 euros.

Fue el propietario del gimnasio quien se percató de lo sucedido cuando, en la mañana del lunes, se dispuso a abrir la puerta, comprobando que estaba forzada. El ladrón habría inutilizado el sistema de acceso a la entidad para los socios, introduciéndose en el despacho en busca de dinero. Al no encontrar efectivo, cambió de plan y optó por llevarse varias prendas deportivas que estaban a la venta en el local, por un importe que no alcanzaba los 70 euros, mientras que el gasto de reparación de los desperfectos ocasionados ascendía a alrededor de 1.000.

Gracias a la visualización de las cámaras de seguridad del interior del inmueble, que recogieron la imagen del autor y su recorrido por las salas y la oficina, el dueño del gimnasio pudo reconocer al presunto responsable del robo al verle sentado en un banco en las proximidades de su negocio. En ese momento dio aviso a la Policía que se personó de inmediato en el lugar y procedió a la identificación del denunciado. El ladrón llevaba puestas, en el momento de la detención, las prendas sustraídas, una camiseta y una sudadera, y admitió haber forzado el gimnasio y haber cogido la ropa del interior.

El arrestado por los agentes de la Brigada de Policía Judicial en la mañana de ayer, carecía de antecedentes.