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PATRICIA JORDÁ | Sexóloga, actriz y autora de "Vooyeur"

"El sexo es una manera de rozar con nuestra mano el paraíso en la Tierra"

"La obra 'Vooyeur" surge de mi pasión por el teatro y, también, por la psicología y la sexología"

Patricia Jordá, en su papel de Lilith.

La obra "Vooyeur" (así, con dos oes) ha triunfado durante tres temporadas en Madrid. Escrita por la sexóloga Patricia Jordá (Alicante, 1980), que hace también el papel de la sabia Lilith, personaje que guía al espectador por esta comedia sexual. Llega hoy a Gijón, al Centro Municipal Pumarín-Sur (21,00 horas) dentro de la gira nacional de un espectáculo que dirige Luis Andrés.

-Empecemos por el título, "Vooyeur" con una o de más. ¿Por qué?

-Es una decisión del diseño del cartel, aunque también se pensó un poco en cierta redundancia para subrayar el papel del mirón, el que disfruta viendo a personas que mantienen relaciones eróticas.

-Usted es la autora de la obra, actriz principal y, además, sexóloga. ¿Por qué orden?

-Diría que lo primero es lo de psicóloga, sexóloga y actriz. Es algo que, en su día, fue en paralelo. Y digamos, también, que esa actividad simultánea generó que yo me planteara escribir esta obra.

-¿El teatro español no ha sabido tratar bien el sexo, como usted cree que debe ser abordado?

-Bajo mi punto vista y por lo que he investigado, la comedia que se ha hecho no ha tratado con la suficiente profundidad el tema sexual. Creo que la gente no se hacía una buena idea de cómo han de ser las relaciones sexuales, que son positivas para la vida en general. Precisamente, se habían reproducido a través de la comedia algunas ideas erróneas sobre el sexo. Basándome en varias ideas que he estudiado como sexóloga, surgió esta obra.

-¿Qué diferencia a "Vooyeur, en este sentido, de otras comedias de enredo más o menos sexual?

-Hay algunos mitos que yo trato de trascender, cómo el que apunta a que el sexo se limita simplemente a la relación coital. En los encuentros sexuales que se mantienen en esta obra, incidimos más en el juego que se establece entre dos personas. Aquí tiene importancia todo, desde una conversación, una caricia o una mirada. Cuestiono también el mito de los preliminares, como si todo lo que hiciéramos preliminarmente fuera poco importante. Mi intención es rescatar todo ese juego que se puede establecer entre dos o más personas. No relegar todo eso. Todo lo que sucede en una relación sexual es realmente importante y es fuente de placer.

-¿No hay buenos orgasmos sin excelentes preliminares?

-Digamos que no existen los preliminares y digamos que los orgasmos son resultado de una relación sexual buena, divertida, en la que se permite experimentar, crear y desarrollar también tu parte artística a través del sexo. Yo creo que, realmente, los preliminares de los que tanto se habla no existen. Un orgasmo es igual de importante que mantener una conversación interesante con alguien que te estimula intelectualmente.

-O sea que combate ese subrayado que suele hacerse sobre los preliminares como si fueran tan sólo una introducción al desenlace sexual?

-No digo que no sean importantes, lo que afirmo es que son lo mismo que la misma relación sexual. Si los llamamos preliminares, directamente les estamos quitando ya importancia, que es secundario a lo que se supone que es en verdad importante. Para mí es tan importante una cosa como la otra. El orgasmo, la relación coital, es importante, pero también todo lo demás. Puedes estar con alguien sin tener un orgasmo y que la relación sea igualmente muy placentera.

- Sin duda. ¿La relación de los españoles con el sexo es mejor o peor de lo que era?

-Todo tiene sus pros y sus contras. Vivimos una etapa en la que el sexo no está ya tan relegado a los ámbitos de lo prohibido, de lo tabú. La gente se siente ligeramente más libre a la hora de hablar o tratar el tema. Se ha luchado mucho por normalizar lo que tiene que ver con el sexo, pero es verdad que ha aparecido toda una industria. Es como si ahora tuviéramos que tener sexo a toda costa, igual que si fuera una obligación. Es como si la sexualidad hubiera salido del oscurantismo para pasar al lado opuesto, con un concepto casi capitalista de las relaciones sexuales.

-Casi industrial.

-Efectivamente, tanto por el consumo de material sexual que está al alcance del ordenador, como porque se ha popularizado la imagen de la cantidad, no la de la calidad,

-¿Por qué decidió escribir esta obra?

-Tenía una compañía de teatro independiente y había escrito algunas piezas, también creaciones colectivas, algún monólogo... Pero "Vooyeur" es mi intento más serio. Y, además, me ha motivado para trabajar también como actriz. Tenía ganas de actuar en algo que yo conociera bien y en un tema que me parece muy interesante. La obra surge de mi pasión por el teatro y, al mismo tiempo, por la psicología y la sexología. Quería unir ambos mundos.

-¿Está satisfecha con el trabajo de actriz que hace como Lilith?

-Sí, muy satisfecha. El trabajo coral de la obra pasa por muchos momentos. Hay que confiar en el trabajo que has hecho. He tenido episodios de alguna crisis, pero ahora estoy muy bien. Lilith es importante dentro de la obra, le da trascendencia. Es un personaje que viene de la mitología hebrea: la primera mujer; surgió al igual que Adán del polvo y no de la costilla de éste. Los escritos cristianos no hablan de ella. Reivindica autonomía dentro de las relaciones, independencia, y se rebela contra el poder de Adán. Por eso es condenada a vivir en el infierno. Nosotros la rescatamos. Ha estado en el infierno y ha conocido la sexualidad, así que nos cuenta esa experiencia.

-¿Lo que Lilith enseña a los espectadores es la práctica del ejercicio de la libertad?

-Sí, sobre todo el ejercicio del placer. El sexo es una manera de rozar, con nuestras manos, el paraíso en la Tierra. Nosotros debemos regar el Jardín del Edén con las personas que nos encontramos en nuestras relaciones de pareja, en nuestras relaciones sexuales. Hablamos de ser más creativos, de jugar con nuestras parejas, de comunicarnos, de tocarnos todo el cuerpo y no tan sólo los genitales.

-¿A qué cree que es debido el importante éxito que viene teniendo la obra desde hace tres temporadas?

-Inicialmente, el tema atrae al público y nosotros hablamos de sexualidad de una manera muy amplia. También es cierto que te puedes excitar en algunos momentos de la obra, te estimula, así que también te lo pasas bien. Algunas de las escenas son propuestas de juego en pareja que intentan de alimentar la imaginación de espectador.

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