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El informe del forense judicial no aclara el origen de la lesión craneal de Germán

El joven agredido en Fomento hace dos meses permanece ingresado en el HUCA recuperándose de las secuelas de una brutal paliza

El informe de l forense judicial que requirió la Fiscalía para determinar si Germán Fernández, el joven agredido brutalmente en Fomento el pasado 14 de julio, había sido agredido con una baldosa o un objeto contundente, como apuntaba algún testigo, no ha permitido determinar con claridad el origen de la lesión craneal que ha ocasionado severas secuelas en la víctima. De esta forma, la revisión de los informes médicos disponibles no ha posibilitado esclarecer los hechos de este caso que todavía se encuentra en fase de instrucción y tiene a siete personas en calidad de investigados, tres de ellos en prisión provisional en el Centro Penitenciario de Asturias.

Este informe, que requirió la Fiscalía hace poco más de un mes, pretendía determinar si el joven se cayó fruto de uno de los golpes que recibió (y posteriormente se dio un fuerte golpe contra el bordillo de la acera) o por el contrario existió la utilización de un objeto contundente que provocó las lesiones que mantienen al joven ingresado en el HUCA. Se mantiene la duda.

En todo caso, y mientras las diligencias oportunas continúan en el Juzgado de instrucción número 5 de Gijón, Germán Fernández sigue luchando, arropado por su familia y amigos, en el hospital desde hace dos meses, que se cumplirán mañana, de la agresión. El joven, ya en planta, va mejorando poco a poco cada día según desvela su familia. "Sabemos que ve, que nos escucha; intenta hablar y se intenta poner de pie", confirmó su hermana en redes sociales. Además, le regalaron una pizarra imantada, con letras de colores, con la que ha comenzado a colocarlas para conformar su nombre o el de quien esté junto a él en ese momento.

La última iniciativa discurrida por su entorno es la elaboración de unas camisetas con el lema "Apoyo Germán" que serán blancas con la letra de color rojo. La idea de esta iniciativa es vestirlas para recibirle a la puerta del hospital el día que Germán Fernández abandone el HUCA para continuar con su rehabilitación. Los médicos marcan entre uno y dos años de recuperación pero la familia confía en acortar los plazos.

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