El Principado sólo ha aceptado, parcialmente, tres de las 13 alegaciones presentadas por la Plataforma Contra la Contaminación en Gijón a la revisión del Plan de Calidad del Aire de la Aglomeración de Gijón. Así, la Dirección de Calidad Ambiental de la Consejería de Medio Ambiente ha rechazado realizar un estudio sobre el origen de la contaminación en la zona de Roces, donde la plataforma considera que cada vez se producen más picos de contaminación. Para el Principado no se justifica ese estudio "por no existir niveles elevados en las estaciones más próximas, Santa Bárbara y Montevil".
Las otras alegaciones rechazadas son: Menos estudios y más soluciones sobre partículas sedimentables; límites más estrictos para el protocolo de actuación en situaciones meteorológicas que dificulten la dispersión de la contaminación; que los apantallamientos de graneles superen en 4 metros la altura de las parvas; que sean de acceso público las imágenes de las cámaras de control de la contaminación; precisar los mecanismos de control e imposiciones a las industrias; dotar de más medios humanos y materiales a los servicios de inspección; incluir en el plan el control sobre las aguas de riego de graneles; concreción de las medidas de movilidad sostenible e incluir en el plan la contaminación acústica y por olores.
Entre las alegaciones estimadas en parte destaca la relativa a la red de estaciones de control: Se acepta la reubicación de la estación de la Campa Torres cerca de Portuarios, pero en terrenos de El Musel y también se acepta mover la estación de la Avenida de la Argentina y dotarla de un medidor de PM 2,5 y otro de benceno. Respecto a El Lauredal, se decidirá ubicar una estación fija tras las campañas de medición y se instalarán tres equipos de medición de partículas sedimentables en el entorno de El Musel. Se rechaza la reubicación de otras estaciones, así como dotarlas de más medidores. También se aceptan parcialmente alegaciones relativas a la difusión de información y participación ciudadana.
