El gijonés de 59 años procesado por un delito de incendio tras prender fuego con gasolina al felpudo del domicilio de su exjefe ha sido condenado a un año de cárcel por estos hechos y al pago de 1.105 euros en concepto de indemnización por los daños causados tanto a la víctima como a la comunidad de propietarios del inmueble, situado en el barrio de El Llano. Una pena, la de un año de cárcel, sensiblemente inferior a los seis años de privación de libertad que le pedía la Fiscalía por estos hechos ocurridos el pasado 26 de septiembre de 2016.

El Código Penal establece para los autores de un delito de incendio condenas que van de los diez a los veinte años de cárcel. No obstante, también especifica que si el incendio no comportaun peligro para la vida o integridad física de las personas el hecho delictivo sería considerado como un delito de daños, por lo que la pena de cárcel sería sensiblemente inferior, de entre uno y tres años. En lo que refiere a los hechos cometidos por R. H. N., albañil de profesión, quedó demostrado en la testifical practicada por los bomberos intervinientes para sofocar el fuego, que ni las llamas ni el humo generados pusieron en riesgo la vida de ningún vecino, de ahí la rebaja en la condenada.

R. H. N., representado por el abogado Manuel Luis Menéndez, declaró en el juicio, celebrado en la sección octava de la Audiencia Provincial, que ese día y esa hora estaba cuidado de su esposa, convaleciente de una operación. No obstante, una vecina del inmueble le situó en el inmueble sin género de dudas el día en que se originó el incendio en el edificio.