La declaración institucional en el Ayuntamiento de Gijón a favor de la oficialidad del asturiano tendrá que esperar una vez más después de que la Junta de Portavoces del Consistorio rechazase ayer la propuesta promovida por Izquierda Unida para lograr este propósito que ya intentó en septiembre de 2015 sin ningún éxito.

En esta ocasión fueron los votos en contra de los portavoces de los grupos municipal es de Ciudadanos y del Partido Popular -José Carlos Fernández-Sarasola y Mariano Marín, respectivamente- quienes dieron al traste con esta propuesta debido a que las normas exigen unanimidad en los votos para hacer efectiva su aprobación.

Desde la formación naranja considera que la oficialidad del asturiano no es un tema que esté en la calle ni que cuente con una mayoría de partidarios entre la ciudadanía. Según una nota de prensa remitida, estiman desde Ciudadanos que la situación del asturiano está perfectamente resuelta tanto por lo establecido en el Estatuto de Autonomía como en la Ley de uso y promoción del asturiano, que garantizan la protección de esta lengua y reconocen el derecho a su uso y aprendizaje. "El estatus actual garantiza el derecho de las personas que utilizan el asturiano y la respeta la voluntariedad individual para aprenderla y utilizarla", argumentó Fernández Sarasola.

El portavoz de Ciudadanos incluye en su rechazo que la declaración obligaría a la mayoría de funcionarios y empleados públicos a aprendarla y usarla que sucede en otras comunidades que cuentan con lengua cooficial.