Las familias de alumnos del Colegio Público Xove denuncian una situación que, en las últimas fechas, se está convirtiendo en demasiado habitual. Los padres de los alumnos aseguran que, en lo que va de curso, ya van varias ocasiones en las que el autobús escolar acumula retrasos "de más de media hora, si es que pasa", con lo que "los niños quedan muchas veces solos en la parada esperando".

La situación se dio en repetidas ocasiones desde el inicio de este último curso escolar. Los afectados, alrededor de una docena de niños "de todas las edades, desde parbulitos a primaria", son los habitantes de los barrios gijoneses de Portuarios y Muselín, las paradas más afectadas por estas incidencias.

"El autobús debe pasar a las 8.40 horas y hay veces que pasa a las 9.30 y otras, directamente, no pasa", asegura una de las madres afectadas, que relata cómo "siempre dejo a mi hija en la parada de la que voy a trabajar, pero un día me llamó media hora más tarde, desde casa, diciendo que el autobús no pasó a recogerles", por lo que tuvo que "avisar a alguien para que se hiciera cargo".

"Los niños quedan solos en la parada, es una inseguridad enorme, puede pasar cualquier cosa y entonces ¿qué hago?", se pregunta esta madre.

Además, asegura, "al llegar a clase les abroncan por llegar tarde, aún cuando no es su culpa, sino del autobús".

Desde la empresa concesionaria de la ruta, Autos Sabino, se asegura que los retrasos se deben a averías mecánicas del vehículo. Una postura que defiende también la dirección del centro que, asevera, "son situaciones aisladas que ya están corregidas". Desde el colegio se envió, aseguran, el pertinente parte de incidencias a la Consejería de Educación del Principado puesto que entienden que "las familias se asustaron".

Mientras que la situación se corrige algunos de los familiares se están organizando "para llevar a los niños en coches, por lo menos para que puedan llegar a tiempo y no estén allí pasando frío y solos, con el peligro que conlleva".

La problemática con esta ruta del autobús escolar viene de lejos, ya que "hace años, ya quisieron quitar el servicio, pero los padres nos movilizamos para recoger firmas y conseguimos que siguiera en activo". Un servicio gratuito para los barrios de Portuarios o Muselín pero por el que los usuarios de La Calzada o la Campa Torres tienen que pagar.