Mario Suárez del Fueyo es el portavoz municipal de Xixón Sí Puede y secretario general de Podemos Gijón, parte de cuya militancia ha firmado un manifiesto en el que reclama mayor dureza en la oposición al gobierno local de Foro. La crítica llega después de un goteo de bajas en el consejo ciudadano de Gijón, con 10 dimisiones y otras tres ausencias.
- Valore el manifiesto.
-Si se hubiera presentado en el consejo municipal, lo hubiéramos aprobado por unanimidad. Sólo me suscita dudas el título: "Por un gobierno municipal a la altura de la gente". En junio de 2015 las asambleas de Podemos y una consulta ciudadana decidieron que no había condiciones para ese gobierno con IU y el PSOE.
- El manifiesto está firmado por una concejala. ¿Cómo afecta al grupo municipal?
-No interfiere.
- Los firmantes piden más contundencia con Foro.
-Es razonable, pero la única forma de endurecer la posición pasa por la movilización social, para presionar a Foro a que cumpla los acuerdos de pleno.
- Cuando un gobierno local está en minoría, ¿no hay forma de hacerse valer?
-Hubo una abstención en un presupuesto y una asunción de la renta social municipal. En la remunicipalización del servicio de ayuda a domicilio, si Foro no cumple el acuerdo plenario, ¿qué? ¿Una moción de censura con el PSOE que no apoya la remunicipalización del servicio? ¿Cuál es el arma? Sólo queda la movilización social.
- Salvo algún miembro de Somos, la mayor parte de los firmantes del manifiesto apoyaron su candidatura.
-No es exacto. Los anticapitalistas se presentaron con candidatura propia. En todo caso, la fotografía fija de 2014 no tiene que ver con la realidad de hoy. Pero tampoco hay mayor preocupación. Que alguna gente crea que no tiene satisfechos sus intereses con lo que está haciendo el equipo de Xixón Sí Puede es legítimo. Ahora, que nos digan una sola propuesta nuestra que no se corresponde con el programa o los intereses de la ciudadanía.
- ¿Fue un error la abstención en los presupuestos de 2017?
-No, porque teníamos un objetivo que era la aprobación de la renta social municipal, que significa que esta ciudad esté en la gama alta de bienestar social de los concejos de toda España.
- ¿Hay un distanciamiento con los firmantes?
-Considero que el trabajo del grupo municipal tiene una valoración general positiva. Y que hay gente que quiere una visibilidad a través de unas discrepancias políticas que no existen. Todas las decisiones que se han tomado en Xixón Sí Puede se han tomado en asamblea o en el consejo ciudadano y en el 90% de los casos por consenso del grupo municipal.
- Un consejo mermado hasta que se renueve en primarias.
-A lo mejor en las primarias está la respuesta a por qué aparecen discrepancias. La mayoría del grupo municipal y yo en particular no estamos en precampaña. Las primarias aún no están convocadas y en este momento hay un órgano legítimamente constituido, el consejo ciudadano de Podemos, con una merma de miembros importante. Es lo mismo que ha pasado en los consejos de todo el Estado, porque Podemos es un partido que nace como un aluvión y que va decantándose, por discrepancias o por abandonos por motivos personales. A partir de esa merma se toman decisiones con un consejo ampliado, al que se invita a todos quienes quieran asistir de los grupos del trabajo. El consejo ciudadano es un órgano votado en unas primarias con más de 1.000 participantes, Xixón Sí Puede es la candidatura que obtuvo más de 29.000 votos y se constituyó también mediante unas primarias con más de 2.000 personas. Eso es lo que da legitimidad al grupo municipal y a mí como secretario general de Podemos Gijón hasta las próximas primarias, cuando quien quiera podrá presentarse.
- ¿Se presentará usted?
-Tomaré la decisión cuando se convoquen las primarias.
- ¿Hay argumentos para no presentarse?
-El argumento que hay es que soy el único concejal que dedica su vida al Ayuntamiento y a Podemos sin cobrar un céntimo de euro del Ayuntamiento, viviendo de sus propios ingresos. Eso forma parte del código ético de cada cual. Puede llegar un momento en uno que diga: "Hasta aquí llegamos". Aún no, pero puede llegar en cualquier momento. No tengo tomada una decisión sobre si voy a presentarme.
- ¿Qué es lo que más le ha dolido de esta situación?
-A nivel personal, nada. Lo privado no tiene valor cuando hablamos de política, es decir, yo no tengo intereses espurios. Yo vine a la política para servir a la gente y creo que lo demostré desde el principio. Desde esa perspectiva, las lealtades y deslealtades son las que cada cual quiera tener con el proyecto y no con las personas.
- ¿Considera que quienes discrepan cuestionan el proyecto o la forma de llevarlo a cabo?
-Creo que las diferencias políticas que manifiestan no son tales. Hasta hace un mes, alguna de las personas que firman el manifiesto planteaban una moción de censura en el Ayuntamiento. El 4 de julio dimos carpetazo a ese tema en el consejo ciudadano, porque como ya habíamos dicho hace casi 11 meses, la única moción de censura posible es aquella que lleva a Josechu y al PSOE a la Alcaldía, porque el PSOE no aceptaba ningún otro candidato. Allá cada cual si lo que quería era contradecir la consulta ciudadana que rechazó aupar al PSOE.
- Tras los contactos con IU en noviembre de 2016 para una moción de censura liderada por Aurelio Martín, ¿tantearon a José María Pérez?
-Nosotros no, pero se le tanteó y no había ninguna posibilidad.
- ¿Sopesaron proseguir?
-No era viable. El reglamento municipal obliga a tener la mitad más uno de los concejales para presentar una moción de censura. Haber anunciado con IU una que no se podría presentar, hubiera sido una operación cosmética que nos dejaría sarpullidos.
- ¿Por qué el rechazo a dar la Alcaldía al PSOE?
-Porque gobernó durante 28 años de una forma que no compartimos, con aspectos que siguen sub iudice y un modelo de ciudad al que no podemos apoyar. Veintiocho meses después de aquella decisión, nos ratificamos. Hemos buscado acuerdos en los temas estratégicos, sin encontrarlos con ellos: en el PGO, el plan de vías, el metrotrén, en lo relativo a El Musel o en la remunicipalización de servicios. El PSOE rechazó el IBI a los ricos. En la renta social nos pusieron zancadillas a través del Gobierno de Asturias. Ya me duele que gobierne Foro. Si en 26 meses hubiéramos llegado a encuentros con el PSOE, no hubiera tenido argumentos para decir que no a una moción de censura, pero lo que hubo son desencuentros. No han hecho ni un sólo gesto para que pudiera haber un avance.
- ¿Cree que el cambio en la FSA y en el PSOE de Gijón pueden facilitar el encuentro?
-Nuestro objetivo es ser una alternativa de cambio en Gijón y somos conscientes de que no va a ser posible sin contar con IU y el PSOE. Tendremos que buscar con quien salga en el PSOE esa alternativa de cambio en 2019.
- ¿Cree que será más fácil que con los actuales?
-No lo sé. A nivel estatal Pablo Iglesias tenía esperanzas con Pedro Sánchez y parece que ya no, a partir de lo de Cataluña.
- ¿Y el acercamiento a IU?
-Ejecutamos las políticas que decide Pablo Iglesias. Por lo tanto, somos tan pablistas como Pablo. Desde que Podemos decidió que había que trabajar con IU, estamos trabajando como nadie.
- ¿Podemos cerrará filas tras las primarias internas?
-Quien sea, que da igual, va a ser el secretario general legítimo con un consejo ciudadano que va a tener que tender puentes a todo el mundo, si el objetivo que tenemos es ganar este ayuntamiento y ganar Asturias. Si el objetivo es ser una voz en el desierto, el no por el no o la política de laboratorio, entonces nunca podrá haber integración ni acuerdo.
- ¿Es optimista al respecto?
-Claramente.
